Quienes van de compras al supermercado se habrán preguntado alguna vez si es mejor inclinarse por un alimento integral o por uno convencional.
Pese a que estos productos abundan en los anaqueles, no siempre se tiene claro las razones por las cuales se deberían consumir. Generalmente, están ligados a la pérdida de peso, pero lo cierto es que sus beneficios para el organismo van más allá.
“Los alimentos integrales aportan carbohidratos, proteínas (en menos cantidad), vitaminas, minerales y fibra dietética; esta última debido a que conservan su corteza natural. Esta fibra ayuda a tener un adecuado tránsito intestinal”, explica la nutricionista Marianela González, de la clínica de nutrición Equilibrio Vital.
Sobre el porqué se ligan a métodos para adelgazar, la especialista explica que producen una mayor sensación de saciedad que evita comer en exceso. Esto colabora en el control del peso.
Los alimentos integrales también aportan energía, son bajos en grasa y ayudan a controlar el azúcar en la sangre.
Altos en fibra. Una de las grandes virtudes de los productos integrales es que son altos en fibra y, cuando esta es dietética (bajos en grasa) y se toma suficiente cantidad de agua, se da un regulamiento del tránsito intestinal, que evita el estreñimiento.
Según la nutricionista de Equilibrio Vital, los más recomendados para incluir en la dieta diaria son los cereales, el arroz, el pan y la pasta integral.
Su consumo debe ser diario, debido a que la ingesta deseable de fibra al día debe ser de entre 25 y 34 gramos.
¿Quiénes pueden consumirlos? Por lo general, son alimentos recomendados para todos. No obstante, en algunos casos, los médicos piden a sus pacientes que los eviten, debido a padecimientos digestivos como colitis, intestino irritable y divertículos.
Sin embargo, cada caso se debe analizar por separado, según explica González.
Si decide incorporar estos alimentos a su dieta diaria, es importante que tome en cuenta que su ingesta debe ir acompañada de un significativo consumo de agua. Idealmente, ocho vasos por día.
Si ya consume esta cantidad y desea incluir en su dieta diaria alimentos altos en fibra, debe entonces aumentar también el consumo del líquido.