Sí sí, sobrarán quienes nos digan que sigamos “durmiendo de ese lado”, pero en medio del caos ocasionado en diversas áreas del sector público y con los docentes aún en pie de lucha, el Ministerio de Educación Pública optó por reclutar voluntarios que apliquen las pruebas de bachillerato que se inician el 30 de octubre y, hasta ayer por la tarde, el número de oferentes alcanzaba casi los 5.000. Todos, absolutamente todos los voluntarios tienen el mismo mérito, pero no deja de llamar la atención que, entre ellos, se cuentan decenas de figuras reconocidísimas del quehacer público.
La lista es voluminosa, pero los medios no tardaron en destacar a figuras como la del Dr. Oscar Arias, expresidente y Premio Nobel de la Paz; Eduardo Ulibarri, una autoridad del periodismo en el país; la exministra de Salud María Luisa Ávila, el cirujano plástico y director de la Fundación Costa Rica Azul, Christian Rivera-Paniagua, y el conocido periodista Freddy Serrano, entre otros.
Hay que decirlo: la inteligente estrategia del MEP se conjugó con el entusiasmo de centenares de costarricenses que están tratando de paliar, al menos en una parte, las enormes pérdidas que significó la huelga del sector público y que podría ser devastadora, en pérdida de tiempo, para los muchachos que están en el proceso de culminar sus estudios secundarios y las consabidas pruebas de bachillerato. La pura y santa verdad es que este gesto de ambas partes simboliza el hecho de que Costa Rica, con todo y lo malo que nos está pasando, sigue teniendo una forma única de resolver las crisis. Al menos, hasta ahora. Y ya eso es mucho. Como mínimo, un respiro de orgullo entre tanta debacle que ha vivido el país en este 2018.
Amanda Moncada, modista y empresaria, ha recibido en los últimos días mensajes de admiración por figuras queridas y respetadas en el país, como son Maribel Guardia y Glenda Umaña. Las ticas le han mandado sus mejores deseos a Amanda en este concurso de Dancing with the Stars. Se sobreentiende que estos buenos deseos son auténticos, porque este roedor se ha salido de su guarida para echarle un vistazo a la tele y ver el gran trabajo que está haciendo esta ciudadana de oro.
La edad, a veces, suele ser un pretexto inválido para mantenerse activo: eso lo ha demostrado ella con esa energía e ímpetu tan vigentes a sus 71 años. Amanda Moncada cada día se empuncha para sacar adelanta sus cada vez más elaboradas coreografías: es arriesgada y le dice sí a todas las osadías coreográficas que le propone su compañero de baile, Billy Corado. Bien por Amanda y por dar una cátedra a la audiencia, sobre todo a los más mayorcitos, de que con actitud y aptitud se puede vivir más y mejor. También supimos que, como bonus, tiene felices a sus compañeros de Dancing, pues todas las semanas les lleva alguna de las espectaculares delicias que prepara su hija Ileana, en su quequería Ili Vanili, con la pone a picar (y pecar) delicioso a medio mundo.
Ahora vamos a hablar de otra Amanda, pero esta vez de una mini. Se trata de Amanda Mata Monge, la “pitufresa”, como le llama su mamá la, humorista Natalia Monge. Además de ser una belleza de chiquita, es muy chispa. Su mamá siempre muestra cómo estudian juntas y aprenden de nuevos idiomas. En medio de su apretada agenda, Natalia siempre saca tiempo para enseñarle cosas nuevas a su pequeña de dos años y medio. Eso sí, Natalia siempre resalta que la tarea no la realiza sola, para lograrlo con su trabajo y su rol de mamá cuenta con el incondicional apoyo de su esposo, Alonso Mata. Bien por la hermosa familia, y que tengan muchos hijos más (uno muy). Diay sí. El mundo siempre necesitará de más Amanditas, piénsenlo, chiquillos.
‘La Nica’ obligatoria. El domingo 7 de octubre fuimos a ver la última función –por ahora– en el Teatro Espressivo de la primera temporada en ese espacio de la obra La Nica; lloramos tres veces y salimos profundamente conmovidos y convencidos, una vez más, de que una obra así debe verse en teatros, escuelas, comunidades, parques, iglesias, fincas cafetaleras y todo lugar posible.
En esta renovada versión de El Nica, obra de César Meléndez (su fallecido esposo), Cristina Bruno nos lleva a transitar por las aventuras y desventuras de María –acompañada de un crucifijo, con quien conversa de tú a tú–. El monólogo es emotivo y es un cable a tierra, una dosis de ubicatex más que necesarias en tiempos donde la xenofobia transita rampante por los caminos de Costa Rica (las redes sociales, las bocas, los dedos y los gritos). Cristina ofrece una actuación intensa, en su justa medida; reímos con ella, nos duelen sus golpes, nos impresionan sus alegrías y tratamos de ponernos en sus zapatos –ella se esfuerza en que lo hagamos– hasta que nos deja repensándonos, repensando lo que hemos hecho y lo que podríamos hacer; solo eso, ya es ganancia. Cristina se metió en el juego teatral y quien nos saludó al público al final era la actriz agradecida y conmovida por la recepción (las palmas, los gritos, la gente que le aplaude de pie), era la viuda que seguía la misión que César y ella emprendieron tanto tiempo atrás. Este cierre me hizo llorar de nuevo. Ahora, Cristina lleva a María de gira donde las requieran: cómo las necesitamos.
En medio de un lleno total de asistencia y medios de comunicación, se realizó la gala de coronación Señora Costa Rica 2018 en el Crowne Plaza Corobicí el viernes 5 de octubre, cuando 15 señoras costarricenses con grandes méritos compitieron por la corona y por el sueño de representar a Costa Rica en el concurso Mrs World Internacional, el más prestigioso de señoras en el mundo cuya sede será en China en el 2019.
Para empezar, el jurado fue de lujo; estuvo integrado por Ileana Valverde (propietaria de Boutique Valesky, quien como es costumbre proporcionó el vestuario completo a todas las involucradas en el concurso); el prestigioso Dr. José Manuel Quirce; la exreina Meyryn Carrillo; la directora de imagen Gabriela Alfaro, el diseñador Henry Bastos W y (¡oh sorpresa!), el exfutbolista, director técnico y hoy comentarista estrella de fútbol, Claudio Fabián Ciccia, quien por suerte está permeando con su inteligencia y su gran tino otras áreas del quehacer nacional.
Ellos eligieron a Yessenia Oviedo Bogantes de 44 años, madre de dos niñas gemelas Trabaja como profesora de inglés en el INA. Yessenia destacó esa noche, por su fluidez al responder las preguntas y durante el proceso por su entrega por la causa que persigue el certamen. Lo que nos encanta de este concurso no solo es la seriedad y profesionalismo con que se realiza, sino la noble causa que tiene como fin: ayudar a los pacientes de la Fundación Pro Unidad de Cuidado Paliativo
Y bueno, tema para profundizar próximamente, la plusvalía que han ganado tanto Teletica como Multimedios al incorporar en su planilla estelar de comentaristas de fútbol nada menos que a exfutbolistas de la talla Monica Malavasi y Jackie Álvarez, en dupla, respectivamente, con Claudio Fabián Ciccia (Canal 7) y Kristian Mora (Multimedios).
El vaivén de puestos que se ha dado en las últimas semanas en medios televisivos ha culminado, por lo que hemos visto, con ganancia para la teleaudiencia. Claudio Fabián y Kristian y sus talentos están harto probados, pero el contubernio con estas muchachas, que hacen mucho más que adornar las transmisiones (qué pena, pero aún ocurre con otras dizque comunicadoras, cuyo mayor mérito son sus curvas pero carecen de conocimiento y buen verbo) se convierte en un sabroso toma y dame porque ellas sí saben de lo que están hablando. Ganar-ganar, que llaman.