Los oscuros nubarrones que se han cernido sobre el país en estos días han provocado que el mes de julio arranque en medio de un clima de incertidumbre, enojo y desazón, en medio de bloqueos, protestas y, por supuesto, el infaltable veneno que destilan las redes sociales.
Sin embargo, poco hacemos con hundirnos en la desesperanza, hay que seguir pulseándola y esperando acontecimientos, de peores hemos salido, y en ese contexto resaltamos el bálsamo anímico en que se ha convertido el espacio La Dulce Vida, cuyas transmisiones, los sábados por la noche en Canal 6, han conquistado a la audiencia que ha ido siguiendo poco a poco la búsqueda del nuevo semillero de humoristas del país.
En un gran acierto, Repretel acogió el proyecto del prestigioso humorista Norval Calvo y juntos lo llevaron a buen puerto. La idea fue genial por varias razones: Calvo celebró los 30 años del programa que lo vio nacer como humorista en los años 80 pero no solo a él, sino también a un nutrido grupo de humoristas que a estas alturas, ya son íconos de la comedia criolla.
Pero, además, consciente de que más temprano que tarde tocará un relevo generacional, Norval instaló, con la nueva versión del espacio, la plataforma para que el país cuente con un nuevo ramillete de humoristas que sigan entreteniendo al público costarricense.
Porque sí, cuando trascendió la idea de Calvo, un puñado de haters reaccionó como siempre, con críticas negativas en redes por la iniciativa, en una actitud incomprensible porque son los que todos los diciembres se quejan de los humoristas que conducen las transmisiones de fin de año porque “son los mismos de siempre”.
Pero bueno, visto lo visto y gracias a los números de audiencia, el espacio pronto se posicionó entre una buena masa de costarricenses que le dieron el beneplácito, esto sin contar con los cientos de personas que audicionaron para colarse entre los elegidos para competir en los programas.
Pues bien, ya en plenas semifinales, el espacio se prepara para elegir a los cuatro mejores que irán a la gran final, es decir, el mejor contador de chistes, el mejor imitador, el mejor stand up comedy y el mejor personaje. El ganador de la gran final será el humorista más completo de La Dulce Vida: cada uno podrá usar sus mejores herramientas y combinar sus capacidades humorísticas para lograr ganarse a la audiencia y a los jueces. Detallazo: para la gran final el público también vota.
Un elemento muy interesante fue el sistema de elección de jurados, pues el programa cambió el jurado todas las semanas porque así fue la primera versión de La Dulce Vida en los 80, y también lograron que la gente no se aburriera de escuchar siempre a los mismos. Eso sí, se les entregaba una detallada hoja sobre los puntos a evaluar en cada categoría.
Franklin Vargas, Rodrigo Villalobos, Carlos Ramos, Opo Marín, Pablo Montoya, Gustavo Ramírez, Gustavo Gamboa, Mario Chacón, Renzo Rímolo, Roque Ramírez y Thelma Darkings, entre otros, juzgaron a los participantes y también dejaron su propio anecdotario, que les dejamos ya a las puertas de los últimos programas, los que depararán al gran ganador.
* Rodrigo Villalobos se convirtió en el juez de hierro, pues no se anduvo con contemplaciones a la hora de esgrimir su criterio con cada participante.
* Doña Merry fue jurado y literalmente se “agarró” con el popular “Gringo Tico”, pues el participante de stand up contó un chiste de la cárcel y Merry le llamó la atención por irrespetuoso: “El humor está en todo lado y el respeto también”.
* El Padre Mix recibió los piropos de “Pablito”, participante de Stand up abiertamente homosexual. “Está tan guapo que no sabía dónde volver a ver”, insistía.
* Esmeregilda, “personaje", se le tiró encima a Norval y ambos se cayeron en el escenario.
* Entre los clasificados hay un chancero de Alajuela, Óscar “Kiko” Estrada; un chicharronero de Poás, Gerardo “Chililli-yo” Sibaja; un vendedor de paquetes funerarios, Freddy Sequeira y un furgonero de Pococí, Felipe Leiva. La única mujer que clasificó fue Fedra Rodríguez (stand up comedy).
LEA MÁS: Fedralu: la actriz y locutora que destacó en ‘La dulce vida’ con “un humor que no lastima”
Así las cosas, la mesa está servida para que estos sábados de julio la gente ponga la cabeza en otra cosa que no sean pleitos y preocupaciones, en la tranquilidad de la casa, sin salir a mojarse, en familia y de a gratis. Como dicen, un pedacito de vida buena. Y eso es mucho decir.
¿Ya no se casa nuestra hermosa Miss Costa Rica, Natalia Carvajal? Como recordarán, la reina de belleza se comprometió a finales del año pasado con el corredor automovilístico André Solano, en un romántico momento que compartieron en sus redes sociales, cuando el también atractivo muchacho le dio a Naty el anillo de compromiso.
Sin embargo, desde hace semanas notamos que Carvajal ha dejado de compartir fotos de y con su amor, y hasta ha quitado algunas que había colgado de ellos dos juntos en su cuenta de Instagram.
Ninguno de los dos ha dicho esta boca es mía, pero según nos soplaron algunos allegados, al parecer la cosa no va más, al menos por ahora. Pero bueno, lo que les sobra a ambos es juventud y tiempo para tomar las decisiones que crean pertinentes más con boda ya en camino.
En cambio, al exjugador y presentador Alonso Solís le está pasando lo contrario, pues el próximo 28 de julio repite boda y con la misma esposa, Débora Soto, a quien ya se había unido en un matrimonio civil y que, según el decir de la pareja a diversos medios, fue una ceremonia sin mucho detalle.
En consecuencia, los esposos se volverán a casar pero esta vez por la iglesia, el domingo 28 de julio a las 8 de la mañana, ya ahí sí con tremendo ágape y acompañados de familiares y allegados. Entre la amistad, el noviazgo y el primer matrimonio, los futuros contrayentes ya llevan cuatro años juntos. Les deseamos muchos años de paciencia, sabiduría y felicidad.
Sorprendidos nos dejó el director de Deportes de Grupo Repretel, Pablo Guzmán, cuando lo observamos el otro día, solitario en el set, ofreciendo información de la recién pasada Copa de Oro y de verdad que se puso las pilas con el tema del peso, pues ya no queda ni resabio de la papadota con la que lo conocimos.
Nos cuentan que Guzmán se fajó no solo a comer mejor, sino también con el ejercicio; lo cierto es que los resultados están a la vista y ojo, el tema del sobrepeso tiene que ver con salud, lo de la estética es secundario, pero diay de rebote el muchacho se ganó un buen poco de admiradoras, porque de verdad que parece otra persona. ¡No le afloje!
En asunto de canciones y composiciones, en Repretel decidieron “agarrarse” nuevamente de las manos. Para el Mundial de Fútbol Brasil 2014 Freddy Álvez compuso y grabó el tema Vamos Los Ticos. Entonces se lo dio en exclusiva a Repretel y a todas las emisoras de Central de Radios.
Pasado el Mundial, la cúpula de Repretel le dijo a Fredy que podía liberar la exclusividad para que lo usaran los demás medios –en un gran gesto y buena intención– pero como ya se identificaba con las transmisiones de Repretel, nadie más lo usó.
Canal 7, en cambio, usaba un tema de Los Ajenos. Repretel siguió usando durante cinco años Vamos los ticos en todas sus transmisiones. En el Mundial de Rusia y en otras actividades FIFA, cuando jugó Costa Rica, se usó ese tema; en los estadios de Rusia sonó en varias oportunidades.
La idea de Freddy fue hacer una canción nueva, original, futbolera, más para arengar en momentos de euforia y celebración. Freddy estuvo feliz escuchando durante todo este lustro su canción por Repretel y en Central de Radios. Sin embargo, ahora con la Copa de Oro, se dio cuenta de que ya no la usaban más y que habían vuelto al tema de Agárrense de las Manos.
Aparentemente la decisión de Repretel obedeció al deseo de volver a los temas tradicionales como ese cover de hace 29 años que sonó en su momento al igual que cuando Italia 90 escuchamos uno llamado Lo Daremos Todo, original de Alfredo Moreno y Ricardo Saénz, pero que sirvió solamente para aquel mundial porque tenía algunos instrumentos típicos italianos, se escuchaban algunos acordes de La Guaria Morada y en algún momento sonaba O Sole Mío.
Por supuesto que cada televisora o emisora está en todo su derecho y con la libertad de utilizar el tema que mejor les funcione, pero al reflexionar en que ya pasaron casi tres décadas de Italia 90, nos preguntamos lo mismo que se cuestionaban los propios héroes de la Sele de C.R. en Mondoví cuando, antes de Brasil 2014, varios decían que ya su gesta había quedado para la historia pero que era hora de que otra Selección Nacional igualara o superara aquella hidalguía. Nuestra pregunta es... ¿por cuántos años más seguiremos “agarrándonos de las manos”?
Surge entonces la pregunta acerca del por qué la Federación Nacional de Fútbol no llama a un concurso, con un jurado calificado y eligen un tema original; pueden incluso elegir entre varios originales que suenan desde hace rato o bien solicitar una composición inédita. De esa manera, sería la verdadera canción de las Sele, todos podrían cantarla y los medios la divulgarían sin incomodidad alguna y en respuesta a los tiempos modernos. Si no nos pellizcamos, pasarán los lustros, pasaremos a mejor vida y allá dentro de 20 o 30 años ¿estarán nuestros nietos agarrándose de las manos todavía?
Volviendo al tema original de Freddy Álvez, por lo visto ya no sonará más, pues si una canción no suena, sencillamente deja de existir por desuso. Ahora el pobre de Freddy anda más triste y confundido que Adán en el Día de la Madre.