Después de 12 ediciones, la directora del proyecto Valoarte, se preguntó: ¿cuál sería el futuro de la iniciativa?
Tras varios años de realizarlo y con muchas experiencias acumuladas, a partir de este 2016 serán varios los cambios que tendrá esta plataforma de diálogo cultural y artístico, que ha colaborado directamente con recursos para el Hogar Siembra, una organización no gubernamental, dedicado al rescate de niñas y adolescentes en riesgo social.
Karen Clachar, una artista plástica costarricense, considera que el valor de una iniciativa como estas va más allá del encuentro entre artistas y asistentes a las muestras, porque cree que esta tiene un propósito más grande que el que cualquiera se pueda imaginar.
¿Cómo define el inicio de esta edición de Valoarte?
Es muy honroso que pensaran en Costa Rica como un país que reciba esta magnitud de piezas. Siento que es la primera vez que yo me confronto a un proyecto de este nivel.
”He disfrutado mucho la selección de artistas nacionales, no solo por su propuesta, sino por lo que escogieron para mostrar”.
Tendremos una línea del tiempo para dar contexto a todos los movientos post- guerra cuando Nueva York se convierte por primera vez en la capital artística del mundo. Es una colección que fue muy depurada por parte de la Fundación Ortiz- Gurdián. Como parte del proyecto en Costa Rica me sentí muy retada y honrada al mismo tiempo por ser parte del equipo de trabajo.
Percibiendo ese apoyo en este año, ¿ cree que ahora será más sencillo realizar nuevas ediciones?
Específicamente hablando de Valoarte 2016, esta es ya una plataforma absolutamente renovada que arranca en Avenida Escazú y finaliza paralelamente en el Museo de Arte Costarricense, con una muestra para cubrir todo ese espacio de todo el público. También es primera vez que Valoarte no tiene concurso y es primera vez que presentaremos una muestra más curada.
¿Cuáles fueron esos cuestionamientos que se hizo para llegar a esta versión renovada?
Esta es la décimo segunda edición, pero son 15 años de trabajar día y noche. Sí sabemos que a partir de ahora será cada dos años.
”Ya después de este tiempo uno ya se replantea si Valoarte debe convertirse en una feria; si debe pasar a un museo; si se debe seguir o no con el concurso o reducir la cantidad de obras y, probablemente, depurar la cantidad de artistas.
”Y este año tenemos que llevar nuestro proyecto al Museo de Arte Costarricense, que desde ya sabemos será todo un reto”.
¿Qué novedades vendrán para el 2018?
Daremos continuidad a la plataforma museo: no sé si será en el Museo de Arte Costarricense o en el Museo de Arte y Diseño Contemporáneo porque podría ser algo interesante y nunca vamos a descartar la posibilidad de convertirlo en una feria centroamericana; pero eso lo veremos después del mes de junio.