Uno podría pensar que la cinta Boyhood ( Momentos de una vida ) no se trata de “nada”, pero es, precisamente, porque quiere abarcarlo todo: la vida de un niño, ni más, ni menos. En la más reciente película de Richard Linklater, un chico común de Texas crece frente a nuestros ojos: doce años después, personaje y actor son un joven que nos ha contado su vida en pantalla. La película se estrenó este jueves en el Cine Magaly.
En el 2002, Linklater, conocido por películas como Before Sunrise y Dazed and Confused , se arriesgó a filmar al mismo grupo de actores por 12 años, con el objetivo de trazar un retrato de los dolores de crecer y la intimidad de las familias modernas. Hoy, con el Globo de Oro a la mejor película y el mejor director en la mano, el filme apunta a seis Óscar, incluyendo los de película, dirección y actores de reparto.
Aunque poco elegante, el título en español del filme es preciso. En Momentos de una vida , conocemos a Mason (Ellar Coltrane) a los seis años y, desde entonces, vivimos con él escenas de juegos, las visitas de un padre casi siempre ausente, los retos de acostumbrarse a un padrastro, la primera emergencia del amor, lo insufrible del colegio... Con canciones apropiadas para cada año y cambiantes estilos de ropa y peinado de Mason, asistimos a su vida, de la niñez a la adolescencia.
Pulso vital. Mason marcha a su propio ritmo, siempre ajeno al de los demás, y nosotros lo seguimos. Para Coltrane, quien empezó a interpretar a Mason a los seis años, fue difícil darse cuenta, al inicio, de la magnitud del proyecto.
“(Linklater) y yo usualmente empezábamos cada nuevo año hablando de dónde estaba yo en mi vida en ese momento, y luego incorporábamos algo de eso en el personaje”, cuenta Coltrane, de 20 años, en las notas de producción. Linklater no quería que hiciera en la película lo que no hubiese hecho en la vida real.
Patricia Arquette interpreta a Olivia, madre de Mason y de Samantha (Lorelei Linklater, hija del realizador) que debe hacer malabares con el dinero para mantenerlos hasta fin de mes. Por este papel, mereció el Globo de Oro a la mejor actriz de reparto, y opta por su primer Óscar. No ha dejado de acumular premios, incluyendo el BAFTA, por su participación en Boyhood .
Por su parte, Ethan Hawke es Mason, el padre que se aventura en Alaska y salta de empleo en empleo. Cuando regresa del norte, intenta ver a sus hijos cada dos semanas; para su exesposa, es un reto verlo de nuevo, pero para sus hijos, una alegría (no exenta de decepciones).
Para Hawke, los experimentos con el tiempo de Linklater transformaron su carrera. En Antes del amanecer (1995) el personaje veinteañero Hawke conoce al de Julie Delpy en Viena y se enamoran.
En el 2004, se filmó un reencuentro, Antes del atardecer , tomando en cuenta los años que había pasado, tanto para los actores como para los personajes, y se repitió la fórmula para Antes de medianoche (2013). Las tres películas se enfocaron en la química entre los actores, y en los aportes que podían traer, con su experiencia vital, a la trama.
Normal, de nuevo. El efecto especial de Boyhood es el tiempo. Es la materia prima del cine para Linklater. De este modo, su estilo visual es sencillo y directo: se deleita con largas tomas de sus personajes hablando y caminando.
Es conforme se repiten, a lo largo de 165 minutos, que estas escenas cotidianas van tomando la espesura del tiempo; es decir, el peso de una historia.
“Estaba intentando contar una historia sobre crecer, pero realmente me interesaba el proceso: cómo cambiamos; cómo permanecemos siendo los mismos; cómo cambian las relaciones, y cómo nos volvemos nosotros mismos en algún momento”, contó Linklater al programa CBS This Morning .
Linklater contó con un apoyo inusual de la productora IFC Films para un proyecto tan riesgoso (después de todo, en cualquier momento el actor principal se podría retirar o estar incapacitado para seguir participando).
La realización costó $4 millones y, hasta la fecha, ha recaudado más de $43 millones en taquilla. Desde su estreno en el festival de Sundance, Boyhood ha cosechado críticas excepcionales. En RottenTomatoes.com tiene una calificación de 98%; en Metacritic, de 100. “Es el selectivo pero acumulativo uso de aparentemente arbitrarias, pero significativas experiencias que le da a Boyhood su distintivo carácter y peso impresionante”, señaló The Hollywood Reporter .
En general, las reseñas destacan las interpretaciones “discretas” y “sinceras” de Arquette y Hawke, principalmente.
“Estos no son padres de película con arcos dramáticos predecibles y soluciones de libros de cuentos, sino personajes cuyo sufrimiento honesto y crudo, y momento de gracia casual dan el impacto de lo real”, consignó la crítica del New York Times .
La radical sencillez de la propuesta visual y dramática también ha recibido críticas. El ritmo del filme es deliberadamente lento, y el desarrollo de los personajes no implica tensión.
Al modo de filmar de Linklater, las escenas se van conectando poco a poco, aunque la dirección no sea aparente y su efecto de fluctuante eficacia. En su crítica , Variety señala: “Linklater le permitió al guion evolucionar como Coltrane lo hacía, lo cual explica por qué se siente menos organizada de lo que quisiéramos o esperaríamos”.
En una escena de la película, Mason pedalea y disfruta como solo un niño podría: con un ritmo ajeno al ruido del mundo. A su modo, Boyhood intenta capturar exactamente eso: la elusiva sensación del tiempo vivido.
'Boyhood' se encuentra en cartelera del Cine Magaly en tandas de 3:10 p. m., 6:20 p. m. y 9:20 p. m. Puede confirmar el horario y otros detalles de exhibición en la página de Facebook de la sala.