Brad Pitt y Marion Cotillard, con Aliados ( 2016) y Will Smith y Helen Mirren, con Belleza inesperada (2016), llegaron a los cines ticos para llenar la cartelera de sensaciones intensas.
La primera de las cintas es un thriller romántico ambientado en la guerra y el segundo un drama por sus cuatro costados.
Ninguna de las dos, dicho sea de paso, logró el favor de la crítica, pero la presencia de tales actores genera un inevitable encanto en las butacas.
El caso de Aliados , filme dirigido por Robert Zemeckis, promete mucho al juntar a Pitt y Cotillard en un mismo cuadro.
La historia va así: durante la Segunda Guerra Mundial encontramos a Max (Brad Pitt), un espía del bando aliado que se enamora perdidamente de Marianne (Marion Cotillard), una colega francesa.
Tras una peligrosa misión en el norte de África, donde fortuitamente se conocieron los protagonistas, comienzan una relación amorosa muy intensa.
Todo parece ir viento en popa, pero una sorpresiva revelación lo cambiará todo. A Max le le notifican que Marianne podría ser una agente doble que trabaja para los nazis.
¿Qué hará Max ante una noticia de ese calibre? ¿A quién le creerá? ¿Morirá el amor?
Lo cierto es que la sospecha se meterá como un dardo en la relación y ya nada podrá ser lo mismo.
Más allá de la critica, que llegó a llamar a la película “melodrama intrascendente”, Aliados tomó algo de fama por asuntos externo a la trama.
Se rumoró que Cotillard y Pitt tuvieron un romance en la cinta y que eso atizó el divorcio de Angelina Jolie.
Cotillard lo ha negado todo y Pitt siempre ha eludido los cuestionamientos de forma tajante, lo cierto del caso es que el morbo sobre el divorcio y el supuesto affair le dio algo de realce a una película que fue calificada con seis puntos, de 10 posibles, en el sitio metacritic.com.
Es curioso, además, que si realmente algo pasó entre ellos la crítica de The Hollywood Reporter resulta divertidamente paradójica: “no hay química entre sus protagonistas”.
De autoayuda. Ni Will Smith, Edward Norton, Kate Winslet, Helen Mirren y Keira Knightley salvan a Belleza inesperada , una cinta catalogada como “sensiblera” y “ridícula” por el El Mundo y la gran mayoría de críticos del mundo.
Pero como gustos son gustos y no necesariamente coinciden con los expertos, de todas maneras quizá usted quiere ver a Smith en el papel de Howard Inlet (Will Smith), un exitoso ejecutivo de publicidad.
A Inlet todo le sonríe, hasta que una tragedia personal llega a su vida y lo hace caer en una profunda depresión.
“Howard era un tipo que tenía la vida resuelta. Se consideraba un experto y un gurú del marketing . Un chico estupendo. Sabía cómo ganar. Pero cuando perdió a su hija, su comprensión de cómo funcionan las cosas en este mundo fue completamente desarraigada y volcada”, dijo Smith sobre la cinta.
A partir de ahí, el trance emocional llevará Smith por un tortuoso camino, del que intentarán librarlo sus amigos.
“Sus colegas más cercanos intentarán animarle. Para ello pondrán en marcha un plan poco convencional para obligarle a afrontar su sufrimiento de una manera sorprendente y profundamente humana. Pero este plan traerá consigo resultados imprevistos”, detalla el argumento de la película.
En ese sentido, Belleza inesperada se presenta como un filme de autoyuda, que podría ser de mucho provecho para personas en situaciones especiales.
De esta manera, Aliados y Belleza americana , se unen al estreno más destacado de la semana: la cinta de ciencia ficción La llegada ( Arrival , 2016).
La llegada es protagonizada por Amy Adams y Jeremy Renner y tiene posibilidades de ser nominada al Óscar en alguna categoría.