Estar de visita en un país ajeno puede generar tanto emoción como incertidumbre. Sin embargo, la era digital ha hecho que ser viajero, con fácil acceso a Internet y algunas aplicaciones, haga las cosas más sencillas.
Bajo esa premisa, Google retó a un grupo de periodistas de Costa Rica, Puerto Rico y Panamá a que utilizáramos su asistente basado en inteligencia artificial, Google Assistant, para recorrer por un día el Casco Viejo de ese país.
El mismo Sundar Pichai, director ejecutivo de la empresa, reconocía en mayo pasado, un cambio en la informática, al que la compañía le ha estado apostando: "el paso de un mundo enfocado en el móvil primero a uno basado en Inteligencia Artificial primero".
Así, con la aplicación de mensajería Allo, que incluye al asistente de Google, los participantes de esta prueba conocimos sobre curiosidades, sitios religiosos e históricos de parada obligatoria en el Casco Antiguo de Panamá, un Biomuseo y hasta recomendaciones para comer.
La comunicación con el asistente resultó efectiva y, aunque era posible hablar por medio de voz con él, se debía procurar no hacerlo cuando hay ruido alrededor, pues en algunos momentos, la conversación del vecino se colaba en su solicitud.
Para evitar ese tipo de inconvenientes, se debe aclarar que las consultas también se pueden hacer a través de texto.
Tatiana Márquez, encargada de Relaciones Públicas y Comunicaciones de Google para Centroamérica y Colombia explicó durante el recorrido que al asistente no solo se le puede preguntar sobre cualquier tema "que la persona necesite saber, sino que hasta la conversación más simple que se pueda tener en el día a día. Si le dices al asistente, por favor llama a mi mamá, la llama".
Un aspecto importante a considerar es que: "La configuración del dispositivo sea el idioma en el que se le está hablando al asistente. Él puede hablar en inglés y en español", comentó Márquez.
En el caso de este último idioma, la experiencia está optimizada para el mercado mexicano. Aunque esto no quiere decir que si se usa desde un país como Costa Rica, Panamá o Colombia no vaya a funcionar.
Ejemplo de ello, según Márquez, es que si se le dice "Ok Google, dime algo triste, te va a dar un dato interesante para los mexicanos sobre un mundial de fútbol, no algo de tu país (Costa Rica) o del mío (Colombia)", explicó.
Desconectados
El asistente no fue la única aplicación utilizada durante el trayecto. Con Maps los participantes llegamos a la Plaza de Francia y al oratorio San Felipe Neri, indicándole a la aplicación que nos brindara el recorrido a pie.
En ese último lugar observamos un pesebre gigante compuesto por 3.000 figuras, que recrea el nacimiento de Jesús, según la tradición cristiana. Ahí, el asistente Google amplió contando que el pasito fue una tradición iniciada por la familia Varela Sandoval, que ocupa una habitación entera y mide siete metros.
En el Casco Antiguo, Google Assistant también nos informó sobre los sombreros pintados, y los sombreros de Panamá. Mientras que los primeros sí son característicos de ese país, los segundos son originarios de Ecuador y supuestamente famosos luego de que Theodore Roosevelt, presidente de Estados Unidos, de 1901 a 1909, vistiera uno durante su visita al istmo, para ver cómo iban los trabajos de construcción del canal.
En esta oportunidad sí contábamos con conexión a Internet, pero cuando no hay acceso a datos o son muy caros en el país que se visita, es posible descargar en Maps, las zonas por las que el viajero se moverá, con el fin de tener acceso a ellas y lograr ubicarse.
Por otro lado, Google Trips también funciona sin acceso a la web."Te descarga toda la información que necesitas tener en tu celular de la ciudad a la que vas, para que, llegado el caso de que no tengas datos, tengas a la mano toda esa información como el pase de abordaje, o si hay tráfico antes de irte al aeropuerto", explicó Tatiana Márquez.
Incluso, si sus tiquetes aéreos están almacenados en el correo de Gmail, Trips pondrá esa información a su alcance, desplegándola en la aplicación y, al conocer su destino, le sugerirá una variedad de planes con los itinerarios diarios más populares que han hecho otros viajeros. Esto funciona así, hasta para 200 ciudades del mundo.
Aunque en algunos casos las pestañas con información que sugieren "Qué hacer", podrían resultar insuficientes para decidir si vale la pena ir a ese lugar o no, lo bueno es que el viajero se puede guiar con las estrellas y recomendaciones que han dejado otros usuarios que ya estuvieron en ese destino.
Guiar al asistente
A pesar de que las apps se pueden usar sin conexión, es un hecho que contar con Internet en el teléfono o tableta podrá facilitarle conocer un destino, sobre todo si se deja guiar por la inteligencia artificial.
Eso sí, hay que tener claro que esta no hace todo por su cuenta, el usuario debe formular preguntas específicas. Así, si usted quiere saber algo del Café Coca Cola será mejor preguntarle: Ok, Google ¿qué es el Café Coca Cola? o ¿dónde queda?, en lugar de solo mencionarle el lugar.
Esa fue la siguiente parada, cerca del mediodía del 24 octubre, día en que se efectuó el recorrido . Al sitio se le considera la primera cafetería del Istmo y fue centro de reunión tanto de los estadounidenses que trabajaron en la construcción del canal de Panamá,como de importantes políticos del país.
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Toda la experiencia, desde el almuerzo típico de pargo frito con patacones en Sabores del Chorrillo hasta el último destino visitado, el Biomuseo, quedó registrada en imágenes fijas y videos con ayuda de la aplicación Photos.
En esa app, usamos una de las tres más recientes novedades anunciadas por Google para este producto, durante su conferencia I/O para desarrolladores, en mayo pasado: "la opción de compartir las bibliotecas de imágenes de forma automática con quien el usuario haya decidido a hacerlo".
De esa forma, se evita solicitar a cada uno que las envíe por correo y se puede observar cómo cada integrante del grupo vivió la experiencia y a qué le prestó atención.
De regreso y ante el congestionamiento vial, o como le llaman en Panamá, el trancón de dos horas y media al que nos enfrentamos, recurrimos a los juegos grupales que se pueden tener con el asistente de Google en la aplicación Allo y hasta a recursos "desesperados" como pedirle que contara chistes, o por lo menos, algo feliz que hiciera el trayecto más llevadero.