Washington. Sundar Pichai, CEO de Google, respondió este martes ante el Congreso de los Estados Unidos a las críticas realizadas en torno a parcialidad en detrimento de los republicanos, críticas realizadas inclusive por el mismo presidente Donald Trump.
En su declaración al Comité Judicial de la Cámara de Representantes, Pichai aseguró ser un grupo comprometido con la privacidad y la seguridad informática, decidido a trabajar de la mano con el gobierno de los Estados Unidos para mantener a salvo al país. Rechazando firmemente que Google tenga algún sesgo político.
Las acusaciones se dieron a raíz de la “recopilación, uso y prácticas de filtrado” de la empresa, en torno a los datos para sus usuarios.
Pichai fue claro al decir que los usuarios confían en ellos para obtener información precisa y confiable, mientras que ellos se esfuerzan por garantizar la integridad de sus productos, implementando una serie de medidas de seguridad para garantizar que se sigan cumpliendo con los criterios.
“Dirijo esta empresa sin sesgo político y me aseguro de que nuestros productos continúen operando de la misma manera, de lo contrario, estaría en contra de nuestros principios e intereses comerciales”, agregó.
Además, sostuvo que su empresa proporciona plataformas que permiten transmitir diferentes perspectivas y opiniones.
Por su parte, el presidente Trump no ha ocultado su desconfianza hacia los gigantes tecnológicos, incrementando sus ataques a los mismos, incluyendo acusaciones a Google de supuestamente censurar a las voces conservadoras y favorecer la búsqueda de artículos con tendencia a la izquierda. Sin embargo, no cuenta con las pruebas que lo respalden.
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Bob Goodlatte, presidente republicano del Comité Judicial, expresó que la audiencia se centraría en cómo las compañías de Internet podrían eliminar puntos de vista específicos y manipular la opinión pública.
“Los estadounidenses confían en las grandes empresas de tecnología para honrar la libertad de expresión. Es responsabilidad del Congreso para con el pueblo garantizar que los gigantes de la tecnología sean transparentes y responsables de sus prácticas”, expresó Goodlatte.
Frecuentemente, Google ha sido el foco de atención por temas de seguridad informática y su dominio en el mercado de búsqueda en la red.
En septiembre, Pichai se negó a participar en una audiencia del Senado sobre las operaciones de influencia extranjera, en la que los legisladores interrogaron a los CEOs de Facebook y Twitter.
Además, se espera que la empresa estadounidense responda a las críticas sobre la iniciativa Dragonfly, un proyecto de motor de búsqueda en China, que respeta las reglas de censura impuestas a los internautas en Pekín.
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Si Google continúa con sus planes de construir un motor de búsqueda censurado, se convertirá en un “compañero de cama de las opresores del pueblo chino, en vez de socio de los oprimidos”, comentó el senador republicano Marco Rubio en un comunicado.