San Carlos.. Un relojero de apellido López, sospechoso de haber provocado un incendio en el que murió su esposa y un nieto, salió esta tarde del hospital San Carlos.
A la 1:30 p. m., bajo vigilancia policial, fue sacado del centro médico donde le dieron de alta.
Tras su salida, agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) lo trasladaron a celdas para luego ser llevado a la Fiscalía.
A López se le vincula con un incendio ocurrió el viernes 12 de noviembre en Santa Rosa de Pocosol de San Carlos, en Alajuela.
En ese siniestro falleció su esposa Margarita Carazo Leiva, de 51 años, y su nieto, de 9 años.
En su momento, López dijo a las autoridades que había ingerido un plaguicida de alta toxicidad, pero en el hospital San Carlos desmintieron esa versión.
López solo presentaba quemaduras de primer y segundo grado en brazos, piernas y parte de la cara.