Vecinos de la comunidad de Pacayas de Alvarado realizaron una pequeña marcha pacífica alzando la voz por los niños y niñas que han sido víctimas de violencia o abusos.
En particular, algunos de ellos se manifestaron inconformes con un reciente fallo del Tribunal de Apelación de Cartago, que dejó en libertad a un pastor que había sido sentenciado por abusos contra menor de edad.
Las razones para revertir la condena aún se desconocen, porque no ha trascendido el fallo integral.
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Los manifestantes salieron a las 11 a. m. de las cercanías del parque infantil de este lugar y con globos, pancartas y camisetas blancas niños y adultos, custodiados por Fuerza Pública, caminaron por algunas calles aledañas.
Tatiana Acuña fue una de las participantes y ella habló por los más pequeños y las mujeres.
“Venimos en nombre de mi sobrina y de todos los niños y mujeres que han sido abusados y han tenido que callar su voz por miedo o amenazas o porque la justicia no sirve.
"Duele mucho ver que en este caso que el trabajo de jueces, abogados y fiscales se vino abajo porque claramente se demostró que ese hombre era culpable y hoy está libre. ¿Cómo es posible que las leyes actúen de esa manera? Por eso hoy estamos aquí porque no es justo. Alzamos la voz por los que no pueden”, manifestó la lugareña sin brindar más detalles.
Una de las organizadoras, quien prefirió no dar su nombre indicó: "La idea surge de un comentario de una vecina de Pacayas, donde dice que no podemos permitir las injusticias, por eso se une la comunidad, por la indignación que sentimos.
“No podemos permitir que nuestros niños se vean afectados. Venimos de blanco como símbolo de paz y pureza de nuestros niños. Esto fue organizado por los vecinos”, agregó.
Kevin Guillén fue otro de los que se pronunció, vistiendo de blanco. "No me gustan las injusticias y siempre han habido víctimas del abuso infantil y hay que alzar la voz cada vez con más fuerza”.
En la marcha estuvieron presentes Elman Rojas Guillén y Andrea Acuña, padres de la niña presuntamente abusada por un pastor en esa comunidad al norte del cantón central de Cartago. Ellos se mostraron muy agradecidos con todas las personas que llegaron a darles su apoyo.
"Entre varios vecinos de la comunidad de Pacayas organizaron para hacer esta marcha y nos invitaron. Al principio no queríamos, pero nuestra hija pidió que fuéramos y hacer también presión para que personas como éstas no anden en la calle.
“Es algo muy bonito saber que el pueblo se nos ha unido a nuestro dolor, nos apoyan y alzan la voz para que ya no existan más abusos en este país”.
Finalizada la actividad pegaron los carteles para que pudieran ser observados por todo el pueblo.