Tres costados del volcán Arenal presentan desde hace varias semanas deslizamientos de material viejo, que al caer podrían resultar letales para quienes entran ilegalmente a zonas restringidas del coloso, en La Fortuna de San Carlos.
Por ejemplo, el 2 de agosto entre las 3 y las 4 a. m. se registró una cascada de deslizamientos que generó 16 sismos vulcanotectónicos.
Esos desprendimientos de material motivaron una inspección por parte de científicos de la Red Simológica Nacional (RSN) y de la Comisión Nacional de Emergencias (CNE).
En las inspecciones se constató que se trata de material suelto, lo que que implica un gran riesgo para personas que ocasionalmente y de forma inescrupulosa acostumbran escalar a la cima, a veces con grupos de turistas, pese a que está prohibida esa actividad.
“Existe un riesgo para la gente que no respeta el ascenso a la cima. Todos tienen que caminar por esos cauces y hay zonas con material suelto que se han tornado muy peligrosos”, explicó el geólogo de la CNE, Blas Sánchez.
Luego de las inspecciones, los científicos descartaron que el Arenal esté retomando actividad interna y más bien lo atribuyen a procesos de erosión.
Desde el 20 de junio los sismógrafos registraban señales que luego fueron asociadas con avalanchas o deslizamientos en el volcán, favorecidas por las fuertes pendientes de las laderas y las altas precipitaciones.
En la estación sismológica más cercana al cráter se detectaron al menos 30 sismos entre el 19 de junio y el 28 de julio. El 30 de julio, de nuevo cayeron varios deslizamientos, principalmente en el flanco noroeste.
El coloso a lo largo del tiempo
FUENTE: ARHIVO LA NACIÓN. || CARLOS FONSECA / LA NACIÓN.
Ingresos furtivos
De acuerdo con el Sistema Nacional de Áreas de Conservación (Sinac), en los últimos siete años se ha incrementado el turismo ilegal en sitios no autorizados y oficiales para visitación.
Mariana Jiménez, directora regional del Área de Conservación Huetar Norte, dijo que el 19 marzo de este año, en un operativo con el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) y Fiscalía, se encontraron ocho turistas extranjeros en zonas prohibidas.
Un mes después, el 18 abril del 2019, por uno de los accesos al cerro Chato (al sureste del Arenal), se halló un grupo de 11 turistas extranjeros a los cuales les cobraban $10 por llevarlos a la parte alta del volcán.
La funcionaria afirmó que los ingresos furtivos ocurren todas las semanas, principalmente hacia el cerro Chato y el volcán Arenal.
“Cuando se inició la intervención al cerro Chato, en abril de 2017, los grupos que se podían interceptar eran de entre 30 a 50 personas, ahora son menores. Los frutos han sido muy buenos y esperemos que los procesos avancen”, afirmó.
En el 2017 un grupo de turistas holandeses fue afectado por un deslizamiento de rocas y material. Los cuerpos de socorro tardaron 13 horas en labores de rescate.
“Se han detectado actividades lucrativas en el patrimonio natural del Estado, así como excursiones de entre 15 a 20 personas que ascienden hasta la cima del volcán Arenal, situación que genera un riesgo a la salud pública, esto porque se promueven actividades donde existe restricción volcánica por el peligro”, dice un informe del Sinac.
Por los flancos norte, oeste y sur
Deslizamientos similares a los de las últimas semanas únicamente se habían notado en días posteriores al terremoto de Nicoya (2012), afirmó Henriette Bakkar, vulcanóloga del Observatorio Sismológico y Vulcanológico de Arenal y Miravalles (Osivan).
El 8 de agosto, el geólogo Blas Sánchez, de la CNE, confirmó con imágenes de un dron que varios puntos de la pendiente cedieron.
Se trata de materiales que se desgranan fácilmente y que por la falta de vegetación se van de picada.
Todavía no se ha estimado cuántos metros cúbicos cayeron y se presume que las lluvias y alguna sismicidad local pudieron originar el derrumbe.
En la inspección con el dron se reconocieron al menos 13 cauces con flujos de material en los flancos norte, oeste y sur del volcán, los cuales culminan en la parte baja con una especie de abanico.
Además, se observó una fuerte erosión en los cauces que tienen las paredes del volcán.
“Toda la parte que tiene cobertura de sedimentos y que no tiene vegetación presenta una erosión importante. Lo que es rescatable es que, por tratarse de una zona deshabitada, simplemente los flujos se depositan al pie del volcán donde no hay estructuras, pues todo está retirado”, dijo el geólogo.
Añadió que no se trata del colapso de grandes masas, sino de una erosión que profundiza en los sedimentos y que cuando recibe el agua de lluvia se transforma en una especie de concreto de flujo muy denso. Esas vibraciones son las detectadas por las estaciones sísmicas.
Ahora los cauces son más visibles desde lejos y lo que fluye por ellos llega a varios ríos que vierten sus aguas al lago Arenal.
Descartan reactivación eruptiva
Mauricio Mora, de la Red Sismológica, afirmó que todos los volcanes son atravesados por fallas geológicas, cuya actividad también puede contribuir a las caídas de material.
“El Arenal no es un macizo muy grande, pero hay fallas cercanas que pueden generar sismicidad”, dijo Mora.
El cono está hecho de materiales que se han acumulado luego de muchos años de actividad y que puede erosionarse por geodinámica externa. “Insistimos en que no tiene nada que ver con una reactivación”, agregó el vulcanólogo.
Lo que ha caído son materiales expulsados por viejas erupciones combinadas con coladas de lava y cenizas, que estaban más concentradas en dirección oeste, porque por ahí fue lanzado el material de las últimas explosiones.
“El cono es de elementos frágiles llamados tefras, que son fácilmente erosionables y la posibilidad de pequeños o grandes descensos de material es muy alta”, indicó Mauricio Mora.
Lo mismo pasa en el Irazú, donde el apilamiento de cenizas y materiales, así como la presencia de agua dentro del volcán hacen que el material se debilite, se torne arcilloso y susceptible a caer, explicó Mora.
A 51 años de destructiva erupción
El Arenal está activo, pero en estado de reposo. Sus últimas erupciones explosivas ocurrieron en 1968, las cuales dejaron unas 87 personas muertas y gran devastación en Tabacón, Pueblo Nuevo y otros poblados.
La actividad abrió tres cráteres en el Arenal. Antes de esa actividad, se tiene conocimiento de otras tres erupciones fuertes y otras de menor impacto a lo largo de casi 7.000 años que tiene el coloso.
Por ahora, no se esperan lahares o corrientes de material acumulado que bajan en forma de avalancha, pero la vigilancia es constante.
“Es esperable que sigan los deslizamientos, pero no se espera que se forme un boquete porque no hay actividad interna” añadió Mora.
Previo a la erupción del Arenal, en 1968, hubo actividad de alerta o precursora, como calentamiento de fuentes de agua y sismicidad, detectada cuando se hacían los estudios de prefactibilidad para el embalse Arenal.
Mauricio Mora, vulcanólogo de la RSN, indicó que el Arenal aún mantiene cierta actividad vulcanotectónica y que todavía en el 2010 mantenía incandescencia en la cima.
Dijo que la columna de magma está en enfriamiento y cuando entra agua en el sistema, genera columnas de vapor visibles desde lejos. Además, ocurre que se vapor, al contacto con nubes más frías genera condensación.
Volcán en estratos
– El Arenal está en un parque nacional de 12.080 hectáreas, creado en 1994 en San Carlos, Alajuela y parte de Guanacaste
– Altitud aproximada: 1.755 metros
– El Arenal es un estratovolcán cónico, constituido por capas de ceniza, piedrillas, bombas volcánicas y coladas de lava
– Desde 1968 y hasta 2010 generó unas 200 coladas magmáticas
– Tiene una cara con densa vegetación y fauna, mientras que al oeste presenta un agreste campo de lavas y arenas
– El acceso al Parque Nacional cuesta ¢1.000 a nacionales y $15 a extranjeros. Abren todos los días de 8 a. m. a 4 p. m.
Fuentes: Sinac y Guillermo Alvarado.