Su carro podría estar entre los 600 que serán robados de aquí a fin de año

Modelos entre los años 1989 y 2005 son los más apetecidos; ventas de repuestos son claves en la cadena de bandas

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

El robo de vehículos no ha mostrado tendencia a la baja en el 2018 en relación con el año pasado. Cada día los delincuentes sustraen en promedio 13 vehículos, por lo que en los 46 días que faltan para terminar el año, otros 600 carros caerían en manos del hampa.

De acuerdo con cifras del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), el año pasado se robaron 4.747 carros, mientras que en lo que va de este ya suman 4.245.

De acuerdo con Kenny Garbanzo Navarro, oficial de robo de vehículos del OIJ, los modelos más apetecidos están entre los años 1989 y 2005. La mayoría los desarman en cuestión de tres horas y van a dar a ventas de repuestos, muchas de ellas clandestinas.

Entre las marcas preferidas están los Hyundai, Toyota, Suzuki, Datsun, Mitsubishi, Nissan, Honda, Isuzu y Chevrolet. De ellos, preferiblemente los de cuatro puertas (tipo sedán) y los de doble tracción (tipo rural). Los hampones prefieren sustraer los carros de las calles y no los que están dentro de viviendas o parqueos, ya que es más riesgoso para ellos.

Este mes en San José, solo dos autos fueron robados de cocheras, el 68% se los llevaron de vías públicas y el resto fueron por bajonazo.

Dos mujeres que iban en un vehículo por Zapote, San José, el domingo, fueron las víctimas más recientes de un bajonazo, pero la Policía logró dar con cuatro de los asaltantes en Alajuela y recuperar el carro, guiados por un dispositivo electrónico que iba en el automotor.

Los detenidos son dos hombres de apellidos Porras, Rosabal, y Jiménez, vecinos de León XIII, en Tibás, y Desamparados.

Según el OIJ, de los carros robados, menos de la mitad se logran recuperar y los que encuentran, muchas veces están sin algunas de sus partes.

Para abrir la mayoría de los carros usan machotes de llaves. No obstante, como los modelos del 2005 al 2018 traen más medidas de seguridad, necesariamente los ladrones requieren la llave original para acceder al vehículo y es cuando amenazan con armas a los ocupantes que ven parqueados, los bajan y les roban.

Como los sistemas antisecuestros se han vuelto comunes, no es extraño que los asaltantes exijan las víctimas indicar dónd está el botón para desactivarlo.

La Policía recomienda por esa razón, evaluar la posibilidad de incluir otro dispositivo que crea un corte de corriente. El carro solo volvería a encender cuanto se active un segundo botón.

También instalar un sistema de pPosicionamiento global o GPS, por sus siglas en inglés, es aconsejable como medida contra robos.

Bandas con funciones espefícicas

La Policía Judicial sabe de la existencia de bandas organizadas. Las que buscan los carros con más demanda de repuestos y los receptadores.

Según los agentes, han identificado un modo de operar según el cual los receptadores previamente han comprado la chatarra de carros chocados de reciente fabricación que fueron declarados con pérdida total, luego ordenan a los ladrones el robo de un carro parecido, le pegan las marcas y numeraciones del chocado y así les queda un carro “a derecho” y a nombre de ellos, por lo que pueden revenderlo sin problemas.

Aunque hay números de motor y VIN que son únicos de cada vehículo, muchas veces esos números están muy ocultos o ilegibles, por lo que es difícil determinarlos.

Las organizaciones tienen personas en funciones específicas; a la cabeza están los que piden los vehículos según ciertas características, luego los robacarros, los encargados de comprar chatarras y los mecánicos que quitan las placas y numeraciones de un carro y las pasan a otros.

Existen muy pocos controles en el destino de los carros declarados con pérdida total, máxime si no cuentan con seguro, dijo el agente.

Actualmente, el OIJ trabaja en un texto de proyecto de ley para exigir más controles a las ventas de repuestos, a las que van a parar los repuestos que extraen de carros robados.

“Ahorita tenemos un problema con la venta de repuestos en forma clandestina en San José y fuera de la capital, pues no tienen permisos del Ministerio de Salud ni de las municipalidades y por eso, mientras se les regula, se realizan visitas regulares por parte de agentes judiciales que revisan con detalle las piezas”, informó.