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Seis de los siete sujetos detenidos en esta casa en Trejos Montealegre, Escazu, cuentan con amplio expediente delictivo. Foto: (Rafael Pacheco Granados)
Una llamada de vecinos de la urbanización Trejos Montealegre alertó a la Policía Municipal a las 3:43 a. m. y permitió la captura de siete sujetos armados en una propiedad privada de esa localidad de Escazú.
La semana pasada ese cuerpo policial había atendido el aparente robo de una caja fuerte, denunciado por inquilinos que luego dejaron la vivienda y se fueron para Heredia, razón por la cual los agentes escazuceños ya venían realizando patrullajes constantes, informó José Rodolfo Ibarra, vocero ese cuerpo policial.
Ahora las autoridades judiciales apuran una orden de allanamiento para ver qué más hay dentro del inmueble y si se puede asociar a los detenidos con otros hechos. Sin embargo, en las últimas horas tres personas diferentes se presentaron a la sede policial diciendo ser dueños de la casa.
En el caso de este lunes, los siete detenidos tenían, además de las armas, mazos y una cizalla o especie de tijera para cortar metal, por lo que no se descarta que en algún entrepiso o paredes pudiera haber algún compartimiento con drogas o dinero, de modo que los agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) solicitaron la custodia del inmueble mientras la Fiscalía coordina con el Juzgado las acciones para allanar.
Las armas decomisadas a los sujetos, cuyas edades rondan entre los 20 y 28 años, son un subfusil automático mini uzi, cuatro pistolas calibre 9 mm y un revólver calibre 38, así como un chaleco antibalas. Una de las armas tenía denuncia por robo, otras tenían la serie limada y no se pudo verificar la procedencia.
El OIJ investiga si los detenidos, de los cuales seis tienen amplio expediente policial, están relacionados con la concreción o la fragua de algún hecho delictivo.
Uno de los sujetos resultó con heridas en su intento de fuga al verse sorprendido por las autoridades, pues primero se cayó al pasar por una lámina plástica en el techo y luego no vio una puerta de vidrio y pasó por ella, de modo que antes de quedar a la orden de la Fiscalía, requirió atención médica.
De momento sigue por definirse si, además de la portación ilegal de armas de fuego, se les relaciona con algún otro hecho delictivo, lo cual se verá una vez que se realice la inspección de la propiedad para lo cual se espera realizar una incursión con perros adiestrados.
