Un joven de 14 años, sospechoso de amenazar con un tiroteo en el Colegio de San Luis Gonzaga, en Cartago, fue detenido este martes por el Organismo de Investigación Judicial (OIJ).

El allanamiento que llevó al arresto se inició cerca de las 4 p. m. en la casa del adolescente, en Agua Caliente de Cartago, y a las 5:55 p. m. el menor de edad fue sacado de la propiedad cubierto por una cobija.

El director del OIJ, Wálter Espinoza, solo indicó que se trata de un estudiante de colegio. Otra fuente judicial precisó que pertenece al San Luis Gonzaga.

En el allanamiento, los oficiales buscaron dispositivos electrónicos.

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“El OIJ diseñó una investigación en dos vías, una de naturaleza operativa, que implicó la realización de entrevistas y algunas ubicaciones. Además, hicimos una segunda investigación en el ámbito de lo informático, sobre la base de ambas vertientes se logró establecer que las amenazas eran ciertas”, declaró Espinoza.

La Policía Judicial recibió la denuncia el 17 de abril, luego de que circularan en redes sociales las amenazas realizadas en un video de YouTube (ya eliminadas).

Según capturas de pantalla, el muchacho advertía que quedaría en la historia de Costa Rica por disparar en un centro de estudios.

“Esta investigación fue pronta, muy efectiva y nos permite esclarecer un hecho que ha provocado mucha conmoción a la comunidad cartaginesa y que evidentemente implicó para el OIJ brindar la atención requerida”, añadió Espinoza.

El Ministerio de Educación Pública (MEP) informó de que no se referirá al caso por estar en investigación judicial.

Ni el OIJ ni la Fiscalía detallaron el delito por el cual se detuvo al sospechoso.

La Ley de Justicia Penal Juvenil se aplica a personas mayores de 12 años y menores de 18. En caso de que este adolescente sea encontrado responsable de algún delito, no podría recibir una sanción mayor a 10 años de internamiento por ser menor de 15 años.

Vigilancia policial

El centro educativo, que suspendió lecciones este lunes, martes y miércoles, anunció que realizará un estudio de comportamiento del sospechoso.

Además dijo que se mantendrán las medidas tomadas antes de la detención. Estas incluyen la vigilancia policial, principalmente en la entrada y salida de los estudiantes del colegio, a partir de la reanudación de las lecciones de este jueves.

“La institución cuenta con tres edificaciones y estaremos presentes en todas. Inicialmente vamos a tomar medidas tanto con la población estudiantil diurna como nocturna”, declaró este lunes el jefe de la Fuerza Pública en Cartago, Erick Calderón, después de una reunión de más de dos horas y media entre representantes policiales y miembros de la junta directiva del colegio.

Calderón indicó que enseñarán programas preventivos a los 2.400 alumnos y les explicarán las responsabilidades de los menores de edad mayores de 12 años, estipuladas en la Ley Penal Juvenil.

“A los padres de familia les digo que tengan una buena comunicación y que sea abierta, frecuente y honesta con sus hijos y que los muchachos hagan un uso adecuado de las redes sociales porque lo que digan podría traerles repercusiones legales", dijo el oficial.

El Colegio de San Luis Gonzaga informó de que el jueves las clases se reanudarán de forma escalonada para que los grupos reciban los lineamientos de seguridad en el gimnasio del liceo, donde no cabe toda la población estudiantil.

De esta forma, las secciones de sétimo y octavo se presentarán a las 7 a. m., décimo y undécimo a las 9:00 a. m. y noveno a las 10:30 a. m.

“Me parece que esta causa es para que no solo en las escuelas y colegios, sino en muchas instituciones realicen protocolos y los agreguen en los planes de emergencia para casos como estos”, apuntó Fernando Alvarado, el presidente de la junta administrativa de la institución.

Alvarado añadió que este miércoles el colegio anunciará, a las 10 a. m. en conferencia de prensa, las medidas a tomar.

Sin embargo, Dinorah Castro, trabajadora social de la Dirección Regional del Ministerio de Educación Pública (MEP) en Cartago, adelantó este lunes que se harán revisiones de bultos. También, se valora contratar seguridad privada y comprar dispositivos para detectar armas y metales.

La madre de una joven de sétimo año, que prefirió no dar su nombre, manifestó que “lamentablemente con ese comentario queda al descubierto la vulnerabilidad que tienen nuestros chicos, ya que tienen que desplazarse de un edificio a otro. Si algo de eso sucediera no tendrían ni necesidad de entrar al colegio, porque los chicos se la pasan en constante movimiento en las calles aledañas".

"Mi hija dice que sí siente temor, ya que no se siente tan segura como antes y que varios de sus compañeros no quieren asistir al colegio porque sienten el mismo temor. Nosotros le decimos que esté atenta por si observa algo fuera de lo normal, que sea más desconfiada y que observe su entorno”, afirmó la madre.

Una alumna de undécimo año, que tampoco quiso ser identificada, indicó: “De mi parte y de mis compañeros, la mayoría no sentimos temor, pero con respecto a los papás, sí hay varios que no los quieren mandar al colegio hasta que se resuelva todo”.