Un muchacho despegó una lámina del cielorraso para poder huir del Centro de Formación Juvenil Zurquí, en Heredia, la cual es exclusiva para menores de edad.
Ni la identidad del joven ni el delito por el que se le acusa se da a conocer, debido a que la ley penal juvenil los protege. Solo trascendió que el menor había ingresado a la cárcel el sábado anterior, en calidad de detención provisional.
Debido a que se trata de un nuevo interno, la autoridad penitenciaria lo colocó en una celda de aislamiento, como parte de las medidas adoptadas por la emergencia sanitaria por el nuevo coronavirus. Debía estar ahí por los próximos 14 días; si no presenta ningún síntoma, es pasado con el resto de la población.
Según indicó el Ministerio de Justicia y Paz, la fuga ocurrió a las 9:40 a. m. de este miércoles, cuando el joven salió por el cielorraso, corrió, se brincó una malla de unos tres metros de altura y huyó del centro penal.
Un oficial penitenciario, que estaba a cargo del fortín, divisó al joven y dio la respectiva alerta a sus compañeros, quienes dieron persecución en conjunto con la Fuerza Pública.
Lograron atraparlo tan solo 15 minutos después del escape, en San Isidro de Heredia.
Esta fuga se suma a una lista de acontecimientos que han ocurrido este año en ese centro penal y que preocupa a las autoridades.
En febrero, tres muchachos prendieron fuego en las secciones D1 y D2 del Centro de Formación Juvenil Zurquí y todo parece indicar que respondió a una disputa entre “cuadrillas”.
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Las autoridades identifican como “cuadrillas" a personas que se reúnen para lograr un objetivo específico, sin que esto signifique que tienen un nivel avanzado de organización.
Al parecer, esos tres muchachos usaron encededores y fósforos que tenían a mano para provocar el incendio. Al momento del fuego, solo estaban esos tres muchachos dentro de esos módulos; el resto (13 personas) participaban de una actividad deportiva.
La Fiscalía abrió una investigación en contra de esos tres jóvenes.
Pocos días después, otros cuatro menores de edad intentaron hacer un motín porque no les dieron permiso para salir a una actividad deportiva.
Esta revuelta ocurrió en la sección C2, la cual da contención a menores indiciados (acusados de algún delito). En total, en ese espacio habitan ocho muchachos.
Según detalló Justicia en un comunicado de prensa, esos cuatro jóvenes incendiaron un colchón en protesta por no obtener el permiso.
Ante esas dos actitudes violentas de los allí internados, el Ministerio de Justicia tuvo que intervenir dicho centro penal.
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