Un hombre, de apellido Fernández, deberá enfrentar una causa penal luego de que, en apariencia, le ofreció ¢20.000 a varios policías para que lo dejaran ir de un retén en carretera.
Según un reporte del Ministerio de Seguridad Pública, los hechos ocurrieron este lunes por la noche, poco antes de que entrara a regir la restricción vehicular sanitaria ante la pandemia por covid-19.
Los oficiales de Fuerza Pública estaban en un puesto de control en vía pública, en Alajuelita Centro, San José, cuando detuvieron al hombre, quien viajaba en un vehículo sin licencia y sin marchamo.
Al momento del abordaje, el sujeto “le ofrece a los policías ¢20.000 a cambio de que lo dejen ir; sin embargo, los oficiales, en el ejercicio correcto de su cargo, lo detienen, le bajan las placas y le efectúan cinco boletas en total”, precisó Seguridad.
A Fernández le levantaron, con la colaboración de la Policía de Tránsito, cinco infracciones por no portar licencia, marchamo y revisión técnica, así como infringir lo dispuesto en la ley con respecto a cinturón y dispositivo de seguridad para menores.
El sujeto fue detenido por penalidad del corruptor y además le decomisaron el vehículo.
Según el Código Penal costarricense, la penalidad del corruptor se aplica al que dé, ofrezca o prometa a un funcionario público una dádiva o ventaja indebida y se castiga con prisión.
En abril pasado, otro chofer, que se identificó como educador, le ofreció un soborno de ¢60.000 a un oficial de Tránsito, a cambio de que no le hiciera una infracción por restricción vehicular.
El hecho ocurrió en Santa Cruz, Guanacaste.