Un profesor de Agricultura, quien impartía clases en secundaria y primaria, pagaba entre ¢15.000 y ¢20.000 a sus estudiantes para que accedieran a tener relaciones sexuales con él.
A otros los violaba, abusaba de ellos o los convencía de diferentes maneras.
Por esos delitos, el Tribunal de Juicio de Bribrí, en Talamanca, Limón, le impuso cumplir 45 años de prisión.
El sentenciado es Jorge Alberto Conejo Calvo, oriundo de Alajuela, quien tiene el título de ingeniero agrónomo y 51 años de edad.
La sentencia la dictaron el martes los jueces Rosa Elena Gamboa, Xinia Marín y Carlos Cartín. Ellos lo hallaron responsable de dos violaciones, un delito de relaciones sexuales con menores de edad, tres delitos de actos sexuales remunerados con personas menores y dos delitos de abuso sexual contra menores.
A la vez, lo absolvieron de otras nueve violaciones, un delito de abuso sexual y dos delitos de relaciones sexuales remuneradas con menores, que también le atribuía la Fiscalía.
El Tribunal de Juicio de Bribrí le prorrogó la prisión preventiva por seis meses, mientras queda en firme la condena dictada.
‘Actos perversos’. De acuerdo con la sentencia y la acusación que había realizado la Fiscalía, los hechos por los que se condenó a Conejo ocurrieron durante el 2010.
En ese periodo, él laboraba tanto para una escuela como para un colegio de Bribrí. Sus víctimas fueron cinco estudiantes de esos centros educativos, quienes tenían entre 10 y 16 años de edad.
El Ministerio Público señaló que Conejo se aprovechó de su condición de educador para llevar a cabo una serie de “actos sexuales perversos y prematuros o excesivos”.
Según se le imputó, él lograba llevar a los menores hasta su casa, ubicada en la misma ciudad, y ahí cometía las agresiones.
En el debate en que se enjuició al profesor Conejo participaron 17 testigos, entre los que se encontraban otros docentes y personas cercanas a las víctimas.
Otros en investigación. Las autoridades investigan otros casos relacionados con docentes que, al parecer, abusaron de menores.
En octubre pasado, por ejemplo, la Policía Judicial detuvo a un profesor de un colegio de Puntarenas como sospechoso de violar a una estudiante de 15 años.
De acuerdo con las autoridades, el sospechoso de esa agresión era vecino de la menor y la violó durante una visita que hizo a la casa de ella.
Otro caso de agresión sexual supuestamente perpetrada por docentes se registró en junio, cuando el director y un profesor de música del Instituto Científico San Marcos, en El Llano de Alajuela, fueron detenidos por un caso de abuso sexual en perjuicio de una estudiante de 14 años.
Debido a estas situaciones, las autoridades piden a las familias estar alertas ante los cambios de conducta de los menores.