Una oficina del Departamento de Evaluación de Conductores del MOPT, en Paso Ancho, San José, fue cerrada temporalmente tras la captura, la mañana del martes, de siete de sus funcionarios.
Ayer, 15 trabajadores del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) eran capacitados para efectuar el trabajo que venían realizando los evaluadores detenidos y acusados penalmente.
Así lo informó ayer, ante consultas hechas por La Nación , el director de Educación Vial, Hugo Jiménez Bastos, quien precisó que esperan normalizar los servicios a partir del próximo lunes.
Según señaló, ayer empezaron a llamar a unos 100 usuarios, que perdieron sus citas tras la detención de los trabajadores, “para atenderlos lo más pronto posible”.
Jiménez dijo que trabajarán de lunes a viernes, desde las 8 a. m. hasta las 6 p. m., “hasta normalizar todo”, y que las restantes oficinas del país operan con normalidad.
Acerca de los empleados detenidos, afirmó que algunos tienen cinco, ocho y hasta diez años de trabajar en el MOPT, sin que fueran sancionados por alguna anomalía.
Ayer, el Juzgado Penal de San José suspendió durante los próximos seis meses a los siete funcionarios, según confirmó , mediante un comunicado, la Oficina de Prensa del Ministerio Público.
Los identificaron como de apellidos Rescia, de 61 años; Torres, de 56; Rodríguez, de 70; Céspedes, de 54; Guerrero, de 48; Cubillo, de 52, y Calderón, de 47.
La Fiscalía no pidió prisión preventiva y todos ellos quedaron en libertad en la tarde de ayer. La suspensión del cargo es con goce de salario, según disposiciones de la Sala IV.
Enfrentan cargos de concusión (funcionarios públicos que, en abuso de sus funciones, obtengan un beneficio patrimonial indebido) e incumplimiento de deberes. El primer delito se sanciona con entre dos y ocho años de cárcel; el otro, con una inhabilitación de uno a cuatro años.
La Fiscalía y el OIJ sostienen que los acusados cobraban entre ¢10.000 y ¢160.000 a quienes no pasaban la prueba de manejo.