Los narcotraficantes pasan por el Istmo centroamericano unas 1.200 toneladas de cocaína por año, dijo ayer el ministro de Seguridad, Gustavo Mata Vega.
El funcionario agregó que esa droga proviene de Colombia y lleva como destino final los Estados Unidos.
Mata señaló que la cifra fue dada a conocer la semana anterior por EE. UU., durante la Reunión Centroamericana de Seguridad, que se realizó en Honduras, en la cual se contó con la participación de funcionarios de aquella nación.
Costa Rica, uno de los países que más golpes da a los narcos, logró decomisar durante el año anterior un total de 31 toneladas, con base en el último informe de la Unidad de Estadística del Instituto Costarricense sobre Drogas (ICD). En los tres primeros meses de este año se han capturado dos toneladas, según cifras de la Policía Control de Drogas (PCD) de Seguridad Pública.
Últimas acciones. Precisamente, estas cifras trascendieron ayer durante una conferencia de prensa, en la cual Mata informó sobre el hallazgo de 38 kilos de coca que llevaba un trailero y de otro cargamento de más de 200 kilos que trasladaba una lancha.
El caso del camión se descubrió el martes en Peñas Blancas de La Cruz, Guanacaste, en la frontera con Nicaragua.
El implicado, un guatemalteco de apellido Santos y de 34 años, intentaba salir del país, pero, al revisar el panel de los instrumentos, se halló un compartimento donde estaba escondida la droga. El imputado fue puesto a la orden de la Fiscalía de Liberia.
Asimismo, el martes, en la noche, una patrullera del Servicio Nacional de Guardacostas (SNG) interceptó, cerca de punta Burica, en el Pacífico sur, una embarcación que tenía pintada en el casco una bandera de Ecuador, en la cual se había transportado droga.
El ministro Mata informó de que en el navío no hallaron cocaína, pero en los alrededores encontraron flotando en el mar ocho sacos, que contenían cada uno 16 paquetes de droga.
“La sospecha es que los ocupantes de la lancha, cuando se dieron cuenta de que eran perseguidos, decidieron lanzar la droga al mar”, dijo.
El jerarca agregó que, pese a ese intento de ocultar el delito, en la lancha había restos del estupefaciente y otros elementos para probar en tribunales el trasiego.
Por este caso están detenidos los tres ocupantes de la embarcación, de apellidos Rodríguez (30 años), Salazar (25) y Obando (31), quienes son originarios de San Buenaventura, Colombia.