Magistrado Rolando Vega: ‘Corte evade elegir jerarca por cálculos políticos’

“Se está evadiendo (la elección del presidente del Poder Judicial), y es por cálculos políticos, a nivel interno, de las personas que, probablemente, no han manifestado su interés real de aspirar a la presidencia y están esperando que otras personas se desgasten”.

Así de contundente fue ayer el magistrado de la Sala II, Rolando Vega, al señalar las razones por las que, según él, la Corte Plena no ha elegido a un nuevo jerarca tras dos meses del fallecimiento de Luis Paulino Mora.

“Esa estrategia, si se le puede llamar así, no es la más conveniente porque genera desgaste, resentimientos y efectos negativos, que no son los deseados, desde mi punto de vista”, agregó el juez, cuyas aseveraciones generaron división entre otros magistrados que fueron consultados.

Vega aseguró que no se refiere a ninguna persona en particular, sino a los intentos fallidos por elegir al presidente. Por ejemplo, el 4 de marzo, la Corte Plena acordó que la votación sería el 10 de abril, y que antes se realizaría un debate con los candidatos. Sin embargo, 15 días después, los magistrados anularon esas fechas y decidieron hacer antes unas “jornadas de reflexión” que planteó , de forma inesperada, el magistrado de la Sala IV, Ernesto Jinesta.

Sobre estas jornadas, Vega indicó que ya él había lanzado una idea en el mismo sentido, pero que la Corte se inclinó por decidir las fechas del debate y la votación.

“Luego, surgen personas que manifiestan interés en el cargo y, entonces, nace una nueva propuesta que retoma la idea del espacio de reflexión, que era una idea original mía. Sigo pensando que es lo correcto, pero que no debemos durar toda la vida”, señaló Vega.

El magistrado apuntó a hechos que, según él, son indicios de que hay intereses de por medio.

“Por ejemplo, la salida de doña Ana Virginia Calzada: yo no sé si se ha analizado cómo iba a votar, pero a ella le interesaba participar en la votación”, subrayó Vega respecto de la jubilación de Calzada, que será a partir del próximo mes.

“En 34 años en la Corte, nunca he visto un momento tan difícil como este. Cuesta que haya acuerdos hasta para tomarse un café y comerse un tamal en Navidad”, reprochó el juez, quien, el pasado lunes, presentó una solicitud para que se definan las fechas, pero esta no fue vista en Corte, por lo que dijo que insistirá la próxima semana.

Diferencias. La posición de Vega causó diversas reacciones entre otros jueces.

Anabelle León, presidenta de la Sala I, rechazó el argumento del juez. “No tengo conocimiento de ningún cálculo”, señaló.

Consideró que, al ser un proceso trascendental, la Corte debe tomar el tiempo necesario para “la reflexión, la definición de un perfil, la presentación o debate y la votación”.

José Manuel Arroyo, presidente de la Sala III, estimó que no es conveniente alargar el proceso, pero dijo desconocer si hay “estrategias para ir más despacio”, y añadió: “Confío en que (el proceso) se ha querido hacer democrático y confiable”.

Para Carlos Chinchilla, juez de esa misma sala, “no hay mala intención ni influencias políticas ni nada de eso. Yo creo que la Corte tiene que tomarse el tiempo para hacerse una idea de a quién queremos”, indicó.

Ana Virginia Calzada, que pronto dejará la presidencia de la Sala IV, también dijo ignorar si hay intereses, pero consideró que el proceso sí ha sido “lento”. Además, lamentó que, posiblemente, en la votación vaya a participar un suplente, “que tal vez nunca ha estado en la Corte, en lugar de mí, que tengo 26 años de experiencia”, según arguyó.

El miembro de esa misma sala, Fernando Cruz, fue el único que coincidió con Rolando Vega. “No hay duda de que sí hay un estira y encoge que tiene que ver con cálculos: los que creen que debe ser más lento o están pensando en alguna persona, o también tienen aspiraciones o creen que no ha salido el candidato”.

Se consultó a la presidenta en ejercicio de la Corte, Zarela Villanueva, pero informó de que, por un asunto en su agenda, no podía referirse al tema hasta hoy.