Guatemala. Acán-EFE Una jueza penal de Guatemala aplazó ayer la audiencia en la que se decidiría la apertura a juicio en contra del costarricense Alejandro Jiménez, alias Palidejo, porque, al parecer, el tico sufrió dos infartos.
Jiménez está preso en ese país como sospechoso de ordenar el ataque en el que murió el cantautor Facundo Cabral, el 9 de julio del 2011.
La jueza Carol Patricia Flores dijo a la prensa que la audiencia fue aplazada para el próximo 10 de setiembre, debido a que los abogados de Jiménez indicaron que este no podía participar en la diligencia por quebrantos de salud.
Los abogados adujeron que el Palidejo sufrió dos infartos durante el fin de semana, por lo que no estaba en condiciones físicas para participar en la vista.
Flores accedió a la petición de la defensa de aplazar la audiencia, y para verificar el verdadero estado de salud del acusado. Para ello, ordenó su traslado a las clínicas de la Liga Nacional del Corazón, centro asistencial especializado en enfermedades cardiacas.
En la audiencia suspendida, la jueza Flores debía analizar las pruebas presentadas por la Fiscalía en contra de Jiménez, para determinar si existen suficientes elementos para que sea procesado por los delitos que se le achacan.
A Jiménez, quien fue detenido en marzo pasado en Colombia y expulsado de inmediato a Guatemala, se le imputan los delitos de asesinato, asesinato en grado de tentativa y asociaciones ilícitas.
Por este hecho, también serán enjuiciados cuatro guatemaltecos de apellidos García, Vargas, Hernández y Stokes, supuestos sicarios contratados por Jiménez para atacar al empresario nicaraguense Henry Fariñas, por una aparente disputa de negocios.