El sacerdote sospechoso de abandonar a su sobrino de seis años en el desierto de Arizona, Estados Unidos, fue acusado por el Ministerio Público.
Al hombre, de apellidos Brenes Villalobos, se le vincula con los presuntos delitos de tráfico ilícito de migrantes y abandono de incapaz.
Este lunes la Fiscalía informó de que no ha presentado el expediente ante el Juzgado Penal, debido a que está pendiente la realización de una diligencia, luego de que el Patronato Nacional de la Infancia (PANI) se apersonara como querellante.
“La Fiscalía Adjunta contra la Trata de Personas y el Tráfico Ilícito de Migrantes informó de que acusó al imputado Brenes Villalobos, así que procedió a comunicar a las partes el requerimiento conclusivo del despacho.
“Por esta razón, el Patronato Nacional de la Infancia presentó una querella, por lo que se debe realizar una diligencia más, antes de presentar el expediente al Juzgado Penal”, explicó la institución por medio de su oficina de prensa.
En tanto, el PANI dijo que desde el 20 de noviembre del 2020 presentó la querella por los hechos ante la Fiscalía y destacó que su participación en el proceso penal es activa.
“El PANI presentó la querella por el delito de tráfico ilícito de migrantes y abandono de incapaz contra el sospechoso de abandonar a su sobrino de seis años en el desierto de Arizona en junio del 2018 (...).
“La atención del caso se ha hecho en coordinación con Relaciones Exteriores y el consulado de Costa Rica en Nueva York”, precisó la entidad.
En la actualidad, Brenes Villalobos no cumple medidas cautelares, luego de que la Fiscalía analizara el caso y determinara que el imputado cumple con los arraigos procesales.
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El tráfico ilícito de migrantes es castigado con una pena de seis a diez años de prisión, según el artículo 249 de la Ley contra la Trata de Personas y Creación de la Coalición Nacional contra el Tráfico Ilícito de Migrantes y la Trata de Personas (Conatt), que establece ese castigo cuando el migrante es menor de edad y se ponga en peligro su vida o salud.
Por su parte, el abandono de incapaz es sancionado con entre seis meses y tres años de cárcel, de acuerdo con el artículo 142 del Código Penal.
La investigación de este caso se desarrolla dentro del expediente 18–00031–1321–PE.
El caso
Brenes, quien también es abogado, fue detenido el 6 de noviembre del 2019 frente a la casa cural de la parroquia de Sardinal de Carrillo, Guanacaste.
Los hechos acusados se remontan al 19 junio del 2018, cuando las autoridades estadounidenses encontraron al niño.
Los oficiales que ubicaron al menor en Lukeville, Arizona, precisaron que este portaba su certificado de nacimiento y un papel con varios números de teléfono de parientes en Costa Rica, los cuales permitieron realizar una identificación.
Indicaron, además, que el menor decía que allí lo había dejado “un tío”, quien le dijo que alguien lo iría a recoger y le ayudaría a encontrar a su mamá.
Según la investigación de la Fiscalía, Brenes llevó al niño hasta el estado mexicano de Hermosillo de Sonora, a 287 kilómetros de la frontera con Estados Unidos. Ahí lo habría abandonado.
El 20 de junio, Brenes ingresó nuevamente a Costa Rica, según el reporte de la Dirección de Migración y Extranjería.
Manuel Eugenio Salazar Mora, obispo de Tilarán– Liberia, anunció el 6 de noviembre del 2019, día de la captura del cura, su decisión de removerlo de sus ocupaciones como párroco, para que dispusiera de todo el tiempo necesario para hacerle frente al proceso penal.
La Nación consultó a la Diócesis de Tilarán– Liberia sobre la situación actual de Brenes e indicaron que a la fecha se mantiene la determinación tomada hace más de un año.
“La Diócesis de Tilarán– Liberia comunica que el sacerdote Brenes Villalobos fue removido de sus funciones como párroco de la comunidad de Sardinal de Carrillo, Guanacaste, desde el 6 de noviembre del año 2019, manteniéndose tal decisión a la fecha. Lo anterior con la intención de no afectar el curso de la investigación judicial para el esclarecimiento de la verdad”, precisa un comunicado de prensa firmado por Gustavo Wattson Gómez, vocero diocesano.
Niño entregado a madre
En setiembre de 2018, luego de más de dos meses de permanecer bajo la custodia de las autoridades estadounidenses, el niño costarricense fue entregado a su madre.
Así lo aseguró en aquel momento el Ministerio de Relaciones Exteriores, que agregó que la familia aún debía someterse a un proceso migratorio para determinar si podrían quedarse en Estados Unidos con algún permiso de residencia.
A la fecha se desconoce lo ocurrido y, aunque este medio planteó la consulta sobre el caso a la Cancillería, esta permanece en trámite.
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Información actualizada a las 8:22 p. m. con más datos.