Minutos después de resultar electo magistrado de la Sala III de la Corte Suprema de Justicia, el juez penal Álvaro Burgos Mata afirmó que uno de sus propósitos es "fortalecer la justicia penal juvenil”.
Este jurista de 58 años de edad y con más de 30 años de experiencia en el Poder Judicial, dijo que el nombramiento lo toma con mucho agradecimiento a Dios, a todas las personas que lo han impulsado y con un deseo de seguir dando lo mejor en el trabajo.
“Estoy muy contento porque es la primera vez que hay un magistrado propietario que haya tenido tanta experiencia en la materia penal juvenil. Esa es una área que tradicionalmente es calificada como el área joven del derecho, que necesita ser fortalecida (...), también porque compañeros de la Defensa Pública, del Ministerio Público y de la judicatura me han dicho que finalmente tienen a alguien que los represente”, agregó.
Actualmente, el magistrado electo se desempeña como juez penal de adultos del II Circuito Judicial de San José (con sede en Goicoechea) y juez de Apelación de la Sentencia Penal Juvenil.
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Álvaro Burgos, quien desde su ingreso al Poder Judicial ha escalado puestos, manifestó que en este momento “es imposible poner en detalle" todo lo que tiene en la mente.
Sin embargo, dijo que entre las ideas que piensa impulsar, también están las de combatir la mora judicial, aligerar los procesos penales y estrechar más los lazos con Adaptación Social, institución encargada del sistema penitenciario.
“A veces hay un abismo por la falta de comunicación entre el Ministerio de Justicia, que es el Poder Ejecutivo, y el Poder Judicial. Espero que yo sea un puente entre ambas instituciones para mejorar las relaciones”.
Burgos que será juramentado este miércoles en la Asamblea Legislativa como magistrado propietario en la materia penal.
“Antes se hablaba del nuevo Código Penal de 1998 y se aplicaron diferentes modificaciones. Algunas de ellas no han sido todo lo eficientes que se esperaban. Para mencionarle una, que hemos notado que no ha sido tan buena, es la audiencia preliminar. Es algo que hay que repensarlo y, si podemos hacer una modificación para que no se alarguen los asuntos, hay que buscar implementarla, siempre que se resguarde el debido proceso”.
Vecino del cantón de Goicoechea e incorporado al Colegio de Abogados desde diciembre de 1987, Álvaro Burgos ocupará por primera vez una silla de la Corte Plena, pues nunca ha sido magistrado suplente.
Precisamente, sobre la escogencia de los magistrados suplentes, cuya lista de candidatos es enviada al Congreso por los miembros de las diversas salas de la Corte, dijo que recientemente publicó un estudio criticando la forma de elección de los magistrados suplentes.
En su criterio, la elección de los magistrados suplentes es una de las cosas que tiene que cambiar: "Definitivamente en Costa Rica es difícil llegar a ser magistrado suplente. El procedimiento hay que revisarlo y permitir que cualquiera que considere que su nombre es apropiado y que tiene las condiciones para ser magistrado suplente, puede, en igualdad de condiciones como lo hacen los propietarios, someter su nombre y sus atestados”.