El Juzgado Penal de Pococí impuso tres meses de detención contra un menor de 15 años como sospechoso de participar en el homicidio de un finquero el 12 de junio.
La medida cautelar la ordenó el juez Ricardo Valverde López, al finalizar una audiencia que se realizó la noche de este viernes en los Tribunal de Justicia de Pococí.
Otro imputado en este proceso penal, de apellidos Montenegro Obando y de 21 años, fue dejado en libertad. A esta persona le dictaron medidas como no tener contacto con testigos ni familiares del fallecido, así como impedimento de aproximarse a la comunidad del Jardín, en La Rita de Pococí, sitio donde sucedió el homicidio.
El menor de 15 años y Montenegro fueron detenidos la madrugada de este viernes durante dos allanamientos realizados por oficiales del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) en Caribe de Cariari, Pococí.
A ellos se les atribuye el crimen de Rafael Mejías Alvarado, de 73 años, el pasado 12 de junio.
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El finquero fue hallado con múltiples heridas de arma blanca en el cuello y brazos. Eso ocurrió en una propiedad ubicada un kilómetro y medio al este del Ebáis de la localidad de Jardín, en La Rita de Pococí. La víctima vivía solo en una finca ganadera.
El cuerpo quedó recostado a una malla de sarán que habían colocado días atrás, para que unos perros no se salieran.
Trascendió que a algunos lugareños les molestaba la presencia de los animales. El malestar se daba porque los canes solían perseguir a los motociclistas y peatones que pasaban frente a la calle de lastre.
Fernando Alvarado, hermano de la víctima, manifestó que todos los días en la mañana él solía llegar a ordeñar una vaca y, luego, regresaba a la 1 p. m., sin embargo ese miércoles pasó hasta las 3 p. m.
“Cuando pasaba, mi hermano siempre me gritaba para saludarme, me decía ‘Dios lo acompañe’. Hoy (el día de los hechos), cuando venía bajando en bicicleta le grité varias veces y no me contestó, por lo que abrí un portillito y lo encontré muerto. Siempre le llevaba un litro de leche. Me devolví hasta un punto donde había señal y llamé al 9-1-1. La última vez que lo vi fue a las 5:30 a. m. Vivía solo desde hace tres años y medio”, dijo el pariente en aquel momento.
Por el momento, el OIJ no tiene claro el móvil del homicidio. Inicialmente, se presumió que podría ser por un robo, pero luego esa hipótesis se descartó.
La identificación de los sospechosos se logró luego de que los agentes judiciales recibieron informes confidenciales sobre su presunta participación en los hechos. Sin embargo, durante el proceso de identificación se decomisó un celular en el cual encontraron evidencia que los involucraba en el homicidio.