Un funcionario del Consejo de Seguridad Vial, de apellido Arias, fue detenido como sospechoso de cobrar una “mordida” a un hombre que llegó a renovar la licencia de conducir.
Según el informe preliminar del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), el ofendido acudió para renovar su licencia, pero el funcionario público, de 33 años, le habría indicado que no se la podía renovar porque su cédula de identidad no se encontraba en buen estado.
Al parecer, Arias contactó luego a la víctima, vía mensaje de texto, y le dijo que si le daba ¢30.000 le podía ayudar con la renovación de la licencia.
Los agentes de la Sección Especializada de Tránsito recibieron la denuncia, por lo que realizaron varias diligencias de investigación y la tarde del miércoles efectuaron un operativo en la sede de esa entidad en la Uruca.
La Policía lo capturó luego de que recibió el dinero por parte del ofendido.
Agentes del OIJ destacados en la Sección Especializada de Tránsito, lo dejaron a la orden de la Fiscalía como sospechoso de cohecho impropio.
El Código Penal de Costa Rica establece que esta acción delictiva se da cuando el funcionario público recibe una dádiva o cualquier otra ventaja o acepte la promesa directa o indirecta de una retribución de esa naturaleza, “para hacer un acto contrario a sus deberes, o para no hacer, o para retardar un acto propio de sus funciones”.
El año pasado otro funcionario de esa entidad fue detenido en la oficina de Heredia por cobrar a choferes para impugnar multas de tránsito.
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