Liberia. El Tribunal de Juicio de Liberia impuso ayer ocho años de prisión a Guiselle Lara Alemán, por introducir menos de un gramo de cocaína (0,76) al centro penitenciario Calle Real, ubicado en este cantón guanacasteco.
El hecho ocurrió el 26 de mayo pasado. Ese día, Lara, de 46 años, fue sorprendida portando esa cantidad de droga entre su brasier, cuando pretendía visitar a su novio.
El Ministerio Público solicitó 10 años de cárcel contra la mujer debido a su reincidencia en la venta de drogas, por lo que ya había sido condenada.
El fiscal Ricardo Quirós dijo que existe jurisprudencia de que no importa la cantidad de droga, sino que el delito se configura por solo el hecho de intentar introducir estupefacientes.
Katherine Angulo, defensora pública de la sentenciada, alegó que debía aplicarse la reciente reforma a la ley de psicotrópicos.
Citó el artículo 77 bis de la legislación, que favorece a las mujeres en estado de vulnerabilidad o de pobreza, cuando cometen este tipo de delitos.
En este caso, las penas irían de tres a ocho años, mientras que si no se cumplen esas condiciones de vulnerabilidad, los castigos rondan los ocho y 20 años de prisión.
La abogada de Lara Alemán pidió una pena de tres años de cárcel, lo cual le habría permitido la libertad condicional.
En la explicación del por tanto de la sentencia, el juez Mario Guido aseguró que se no podía determinar que Lara viviera una situación de vulnerabilidad o pobreza.
“Este Tribunal considera que usted no se encuentra pobre, sí es una persona humilde, pero no pobre, pues eso es estar despojado de todo lo necesario”, afirmó Guido.
Antes de conocer el fallo, Lara testificó ante el Tribunal y afirmó que ‘la trataran bien’ por el error tan grande que cometió.
“Estoy muy arrepentida de lo que hice”, afirmó a los jueces Gustavo Gillen, Mario Guido y Gonzalo Coronado. Además de los años de cárcel , se le prorrogó la prisión preventiva durante seis meses.
Se conoció que la defensora apelará el fallo.