La angustia que viven desde hace un mes los familiares del mensajero Jeffry Vargas Ortiz, desaparecido en calle Mesén de La Unión, podría concluir en los próximos días, luego de que este lunes los allegados aportaron radiografías dentales que facilitarán la labor forense.
Estas radiografías se confrontarán con las piezas dentales de un cuerpo encontrado el fin de semana en una represa en Brasil de Mora, pues podría tratarse del muchacho.
Aunque a la familia se le informó inicialmente de que los resultados de ácido desoxirribonucleico (ADN) podrían tardar hasta un mes, ellos esperan que en esta misma semana se les clarifique si se trata o no de Jeffry.
El mensajero desapareció el 20 de octubre en una lluviosa tarde cuando trabajaba y al parecer la moto fue arrastrada por una corriente de agua.
El vehículo y una bota aparecieron después pero, pese a la intensa búsqueda de familiares y amigos, así como de oficiales del OIJ y socorristas, de Jeffry no se sabe más.
Al saber del hallazgo de un cuerpo en la represa, la familia ha colaborado con las pruebas de sangre que el sábado aportó la madre del mensajero, Estrella Ortiz, y este lunes llevaron las placas dentales.
De acuerdo con Jason Vargas, uno de los cinco hermanos de Jeffry, esas placas corresponden a un implante de diente que le habían practicado a Jeffry luego de un golpe con un panel cuando trabajaba en construcción.
Esa vez el Instituto Nacional de Seguros (INS) le cubrió los gastos y Jeffry pudo recuperar su diente que le fue implantado con un tornillo, lo cual es algo muy específico y sería determinante para definir si los restos son del mensajero, que el 14 de diciembre cumpliría cinco años de trabajar para la empresa MultiSol S. A.
Jeffry había construido unos apartamentos en una segunda planta de la casa de su familia en Curridabat y vivía ahí con su esposa Mildiana Henríquez, quien está embarazada y pronto dará a luz al primer hijo procreado con Vargas.
Lindsay Martínez Paniagua, jefa de la Unidad de Delitos Varios del OIJ, informó este lunes que desde que se tuvo noticia de la desaparición comenzaron las acciones para tratar de dar con el cuerpo.
Además de doce inspecciones en los alrededores del sitio donde apareció la moto, en Calle Mesén de La Unión, se coordinó con tres represas para que estuvieran atentas por si algún cuerpo era arrastrado por las aguas.
El sábado se les informó del hallazgo y de inmediato se coordinó el rescate y se le comunicó a la familia lo procedente.
“Ahorita esperamos que nos den los resultados lo más pronto posible.Como hermano quisiera que todo esto terminara, ya sea resignarse a que el cuerpo que apareció sea el de él, o en caso contrario vamos a seguir la búsqueda, porque por ahí debe andar”, afirmó Jason.
Este lunes el OIJ informó de que están a la espera de los resultados forenses para dilucidar cuanto antes el caso.