Las distintas agrupaciones que marcharon ayer por la avenida segunda defendieron el salario justo y la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).
Aparte de rechazar la privatización de los servicios de salud, las consignas de los gremios dijeron no a la reforma fiscal.
Los primeros pasos de la marcha comenzaron a las 9:45 a. m. al sonido de un par de bandas musicales desde la iglesia La Merced, en San José, con rumbo a la Asamblea Legislativa.
Grupos minoritarios que promovían derechos de policías, empleadas domésticas y trabajadoras del sexo también participaron de la actividad.
Según dijeron algunos dirigentes sindicales, hubo participación de representantes de agrupaciones de todo el país.
“Nos sentimos satisfechos de nuestra filiación. El movimiento sindical sigue en pie de lucha”, afirmó Gilberth Díaz, presidente del Sindicato de Trabajadores de la Educación Costarricense (SEC).
Por su parte, Alexánder Ovares, presidente de la Asociación Nacional de Educadores (ANDE), indicó que la respuesta de las organizaciones fortaleció la defensa de políticas salariales justas.
La Confederación de Trabajadores Rérum Novárum reportó la asistencia de 64 grupos, mientras la Coordinadora Unitaria Sindical y Magisterial (Cusima) 15 organizaciones.
Los discursos de sindicalistas, previstos para pronunciarse frente al Congreso, fueron suspendidos cerca del mediodía pues se dio paso a exposiciones de diputados de oposición quienes relataron lo que ocurría en la pugna con Liberación Nacional por el Directorio.
Después de la 1:15 p. m., los asistentes a la marcha comenzaron a dispersarse, luego de que el exdiputado José Merino dijo que Luis Gerardo Villanueva declinó asumir la presidencia del Congreso.