Un individuo que, al parecer, ingresó en una vivienda a robar, murió luego de que el dueño de la casa lo hirió en el pecho con un arma de fuego, calibre 38.
El hecho ocurrió ayer, hacia las 2:05 a. m., en San Francisco de San Isidro de Heredia.
El fallecido, quien murió en el sitio, fue identificado con el apellido Redondo, de 39 años de edad.
Los paramédicos de la Cruz Roja de la zona informaron de que, cuando llegaron al lugar, Redondo ya había muerto.
Detalles. Según las autoridades, para ingresar en la vivienda, el sujeto hizo un agujero en la malla que rodea la propiedad.
Los oficiales que llegaron al sitio, manifestaron que cuando el propietario de la casa, de apellido Fernández, se percató de que había entrado un extraño, sacó el arma de fuego y le disparó.
Los moradores de la casa avisaron del hecho a las autoridades.
Los agentes judiciales se encargaron del levantamiento del cuerpo y de trasladarlo después a la Morgue Judicial, en San Joaquín de Flores.
Sin permiso. Jimmy Araya, oficial de la Fuerza Pública, dijo que el arma con la que le dispararon a Redondo no está inscrita.
Además, afirmó que el propietario de la vivienda tampoco tenía el permiso de portación de armas exigido por la ley.
Los agentes judiciales recabaron indicios e iniciaron una investigación con el fin de esclarecer los hechos.
De acuerdo con un informe sobre armas de fuego y violencia doméstica en Costa Rica, presentado por Max Loría, viceministro de Paz (cartera de Justicia), entre el 2005 y el 2011 el número de armas de fuego utilizadas para cometer delitos aumentó en un 45%.
El documento indica que en el país están registradas 200.000 armas, y se calcula que, por cada una de ellas, hay al menos otra cuya tenencia es ilegal.
Loría manifestó que urge la aprobación de una nueva ley que mejore los controles sobre el uso de las armas.
Además, señaló que la legislación debe limitar los permisos de armas, para defensa propia, a una por persona.