La seguidilla de 18 homicidios ocurrida en los últimos nueve días tiene a la Policía ajustando estrategias “día a día”, pero aún así las autoridades confían en que este año cerrará con unos 42 crímenes menos que en el 2018.
“Es entendible que la ciudadanía sienta angustia”, expresó el director del OIJ, Walter Espinoza, ante la seguidilla de asesinatos que, según dijo, exige presencia policial en las calles y un análisis de los parámetros sociales que la genera.
Al respecto, Espinoza detalló que San José concentra la mayoría de casos registrados durante el 2019 y que su principal móvil son asuntos de drogas.
Añadió que el 70 por ciento se cometen con armas de fuego, lo que también debe llamar a la reflexión.
Hasta este 1.° de noviembre, se han registrado 37 homicidios menos que en igual periodo del año pasado. No obstante, en agosto la brecha entre los dos años era de 70 casos, lo cual evidencia el repunte ocurrido en las últimas semanas.
Fiorella Salazar, ministra interina de Seguridad, señaló que se afrontan tiempos complicados y pese a que constantemente están sacando armas de las calles, surgen asesinatos en otras zonas conflictivas, cercanas a las que tienen el foco policial.
“Hay situaciones que van más allá de lo que pueden hacer los cuerpos policiales como, por ejemplo, las cosas que pasan dentro de las viviendas, en casos intrafamiliares. Son situaciones en las que no podemos estar presentes a priori”, manifestó.
Justamente, uno de esos hechos sacudió, la tarde de este viernes, la comunidad de Calle Matilde en Barva, Heredia, donde un joven de 19 años mató a su pareja sentimental de 24, identificada como Eva Morera Ulloa.
Aún así, la jerarca expresó su confianza en que el trabajo conjunto y los operativos con los diferentes cuerpos policiales, permitan atenuar lo acontecido en los últimos días.
Crímenes en la periferia
Por su parte, el director de la Fuerza Pública, Daniel Calderón, afirmó que la vigilancia en zonas prioritarias se ha mantenido día y noche bajo un estricto control, pero los recientes asesinatos han ocurrido fuera de ese sector, en la periferia.
“Esto constantemente nos obliga a replantear las operaciones, a hacer reacomodos del recurso todos los días y en todo el país”, dijo.
Calderón sostuvo que las disputas entre grupos narco generan la mayoría de homicidios, pero advirtió que en cada zona del país hay situaciones diferentes.
Al respecto, el funcionario estimó indispensable el intercambio de información entre cuerpos policiales para ser efectivos en la lucha contra el crimen.
“Estamos muy confiados en que vamos a mantener los números positivos, pero va a ser un esfuerzo muy grande el que vamos a tener que hacer de cara al cierre del año”, indicó.
Sobre los crecientes casos en La Cruz, Guanacaste, donde el año pasado hubo tres homicidios y este año se registran 15, indicó que la mayoría obedecen a tráfico internacional de drogas.
“Hay personas en el país que están dando soporte a las organizaciones internacionales que trasiegan droga hacia el norte”, aseveró Calderón.
El homicidio más reciente en esa zona ocurrió este viernes cuando mataron a Danilo Argueta Meza, de 53 años, quien había sido investigado por casos de drogas.
El director de la Fuerza Pública indicó que en ese cantón guanacasteco hay mucha operación irregular por vía marítima, así como por pistas clandestinas. “La zona presenta facilidades para eso. Hay personas que alquilan fincas o terrenos y le dan soporte logístico a las organizaciones para que puedan operar”, acotó.
En la zona metropolitana estima que faltan esfuerzos para atacar la demanda de drogas. Calificó de alarmante la cantidad de personas en las calles con problemas de adicción, que forman un mercado atractivo.
“En San José, hay más de 3.000 personas en condición de calle y muchas de ellas consumen hasta 30 piedras de crack al día”, sostuvo.
Para mantener esos vicios generan asaltos y surgen homicidios como el de un comerciante ultimado la noche de este viernes en Alajuelita.
Se trató de Johnny Hernández Campos, de 54 años, quien recibió al menos tres balazos.