Un individuo de 32 años fue detenido este martes como sospechoso de matar de dos balazos a un ingeniero en sistemas, cuando este último trató de evitar que asaltaran una pulpería propiedad de su madre.
El homicidio había ocurrido a las 7:10 a.m. del pasado 25 de febrero, en San Rafael de Vásquez de Coronado, San José y fue en perjuicio de Jorge Eduardo Lizano Chacón, de 34 años.
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En aquella ocasión llegaron tres individuos al establecimiento. Uno de ellos ingreso y le dijo a la propietaria, Norma Chacón, que era un asalto y que le entregara el dinero producto de las ventas. Debido a que la mujer le respondió que no tenía plata, el sujeto la tomó del pelo y la amenazó con una arma de fuego.
Al escuchar los gritos de la mujer, Jorge Lizano –quien se encontraba en la casa contigua al negocio– acudió para ayudarla. Forcejeó con el asaltante y este le disparó en dos ocasiones en el pecho.
Según la Policía Judicial, Lizano fue llevado con vida a la Clínica de Coronado, donde falleció. Los individuos no lograron robar nada y se presume que huyeron a pie.
La mañana de martes, agentes de la sección de Homicidios del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) allanaron dos viviendas, una en San Pedro de Coronado y otra en Purral de Goicoechea. En esta última fue donde detuvieron al sospechoso de apellidos Cárdenas Mora, de 32 años.
En la intervención policial decomisaron municiones para armas de fuego calibre nueve milímetros y 380. También encontraron una gorra que se presume portaba el sospechoso el día del homicidio.
Álvaro González, subjefe interino del Departamento de Investigaciones Criminales del OIJ, dijo que cuentan con suficientes elementos probatorios para relacionar a Cárdenas con el crimen. Agregó que este sujeto tiene antecedentes por robo agravado y maltrato a la mujer.
Respecto a los otros dos individuos que participaron el hecho, el jefe policial explicó que uno de ellos es de tez blanca, delgado y de pelo castaño. Acostumbra a usar barba y tiene una estatura de 1,75 metros, aproximadamente. El otro, dijo González, también es blanco, delgado como de 1,70 m de alto y se presume que ambos son vecinos de Purral.
Agregó que aunque estas personas usaron suéteres y gorras para cubrirse, se pudo localizar a testigos que los describieron con bastante precisión.
El detenido quedó en manos del Ministerio Público, para que se le determine su situación jurídica.