Mientras los familiares del ingeniero asesinado este lunes en La Trinidad de Alajuela organizan el funeral en Guanacaste, los vecinos de la barriada donde lo mataron afirman que en los últimos meses se han suscitado asaltos a locales y peatones.

Por ahora, la familia de Mauricio Alvarado Pizarro, prefiere no referirse al caso.

Una nuera del fallecido indicó que, posiblemente, lo velarán este martes y esperan sepultarlo mañana, día en que cumpliría 43 años.

El funeral será en Guanacaste, de donde era oriundo. Alvarado fue ultimado de cuatro balazos en una acera que está a escasos 150 metros de su casa y a igual distancia de la parada a la que se dirigía.

La mujer indicó que su suegro no tenía carro y solía viajar en bus de la casa al trabajo en la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS), en San José.

Hampa toma espacios

Ana Álvarez, vecina que tiene 35 años de vivir en La Trinidad , afirmó que ve pasar las patrullas por la calle de la Mutual Alajuela, pero asegura que no ingresan al barrio, donde en los últimos meses han asaltado un video, un local de comida china y a varios peatones.

“Para adentro es un atentado. En el parque se esconden para asaltar y hay lotes encharralados por todo lado”, sostuvo la vecina, quien sostiene que años atrás esa barriada era tranquila.

Afirmó que días atrás los vecinos le pagaron a un señor que no es de la zona para que limpiara los charrales de la cuadra, porque no se veía nada y los lotes baldíos se convierten en búnkeres o sitios para consumir droga, sin que al municipio le preocupe la situación.

A menudo ven carros merodeando y también desconocidos en moto que, al parecer, perpetran los asaltos.

Los vecinos no se explican el motivo del crimen del trabajador de la Caja, pero afirman que los asesinos posiblemente habían analizado la hora en que salía de la casa y la ruta que seguía.

Antes de residir en esa comunidad de Alajuela, la víctima había vivido en Sabana sur de San José y en Nicoya, Guanacaste.

Algunos lugareños afirmaron estar atemorizados, porque a la hora del asesinato había muchas personas en la calle y vieron a los pistoleros disparar y huir.

Sostienen que la Policía solo llega cuando se ha perpetrado algún golpe.

El director regional de la Fuerza Pública de Alajuela, Erick Calderón, afirmó que se tiene recurso destinado al distrito San José de Alajuela.

Alegó que en todo el cantón central de Alajuela hay patrullajes constantes y que se ha logrado disminuir los delitos contra la propiedad.

Sobre los homicidios, Calderón sostiene que se han reducido en relación con el año pasado.

Con base en las estadísticas del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), Alajuela es la tercera provincia con más asesinatos del país (55), seguida Puntarenas (54), mientras que San José (144) y Limón (88) encabezan la lista.

Entre los homicidios más recientes figura el ocurrido el 15 de octubre en El Coco, La Guácima. Una balacera dejó sin vida a un joven de 20 años, identificado como Róger Calderón Rizo.

Esa vez resultaron heridas dos mujeres. La Policía recogió 10 casquillos y desconoce si Calderón era el blanco de los gatilleros o una víctima colateral.

El 3 de setiembre, en Villa Bonita, mataron a un sujeto a pleno día frente a la subestación del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) y dos días después, en El Trópico 2, asesinaron a un menor de 16 años, de apellido Núñez, al parecer en un lío por drogas.