Un trabajador agrícola que realizaba sus tareas en un plantío de melina, divisó este viernes el cuerpo de un hombre que tenía sus manos amarradas con mecate y aseguradas con cinta adhesiva. Además estaba amordazado y presentaba varios impactos de bala en la cabeza y el pecho.
El hallazgo fue a eso de las 3 p. m. en la zona de La Bota de Laurel, Corredores. Cuando las autoridades llegaron al lugar, revisaron la escena y confirmaron con familiares que llegaron al sitio la identidad del fallecido.
Se trata de José Ernesto Portilla Morales, de 24 años, quien había desaparecido de su casa en Paso Canoas desde hace seis días, sin embargo los familiares no lo habían reportado a las autoridades. Ellos lo buscaban por la zona pero no tenían mayor rastro hasta hoy, cuando un peón lo encontró sin vida.
Según las autoridades este nuevo homicidio tiene características muy similares al ocurrido hace una semana cuando encontraron un cuerpo en Coto 41 de Corredores.
Esa vez otro hombre apareció con sus manos pies atados con mecate y asegurado con cinta adhesiva. Ese cuerpo también estaba amordazado.
Portilla era costarricense, soltero y se desempeñaba como taxista informal en Paso Canoas.