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Evelyn García se mostró agradecida por la colaboración de Techo y Gollo que hizo posible que tuviera una vivienda nueva. Ella destacó el trabajo de los voluntarios que sacaron adelante el proyecto. ( Gollo para SC.)
Evelyn García ya no tendrá que preocuparse más porque el piso de tierra de su casa, la cual construyó hace cuatro años con tablas viejas, se humedezca en la época lluviosa o levante mucho polvo en la seca.
Para ella, y para otras nueve familias que vivían en condiciones similares, esas preocupaciones quedaron atrás el 17 de abril.
Ese fin de semana, más de 250 voluntarios de la organización Techo y de tiendas Gollo, apoyados por los vecinos de la comunidad, cambiaron la vida de esos hogares, en Pococí, Guápiles.
Juntos construyeron 10 viviendas transitorias, donde permanecerán desde ahora en una condición más digna.
Unión de fuerzas.
La iniciativa contó con el aporte de Gollo, que donó alrededor de ¢21 millones para cubrir el costo de los materiales necesarios para la construcción de las casas.
"En Gollo, decimos sí a las alianzas público-privadas que generen desarrollo. En este caso, el trabajo voluntario de más de 160 compañeros, la tenacidad y el esfuerzo de la comunidad de Sota 2 y la experiencia de Techo permitieron mejorar la calidad de vida de estas familias", precisa Andrea Morales, encargada de Responsabilidad Social de Gollo.
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El esfuerzo y el deseo de ayudar a terceros parece contagiar a todos los que sumaron para que 10 familias tuvieran una vivienda digna. (Gollo para SC.)
Por su parte, Franco Porta, de Techo Costa Rica, resalta que este paso representa una oportunidad para que las familias se esfuercen a diario para tener una vida mejor y enfrenten los desafíos de su entorno mediante la organización comunal.
"Es muy gratificante saber que uno aportó para que estas personas tenga un techo digno y puedan cambiar de vivienda", dice Giancarlo Quintero, voluntario y colaborador de Gollo de Guápiles.
Manos amigas
La jornada, que concretó la construcción de las viviendas de Pococí, formó parte de la Semana de Voluntariado que organizó Grupo Unicomer, dueño de las marcas Gollo y La Curacao.
La actividad se llevó acabo en forma simultánea en los 21 países donde el grupo tiene presencia y contó con la participación de más de 1.500 voluntarios.
Se unieron a dicha iniciativa Costa Rica, El Salvador, Nicaragua, Ecuador, Honduras, Guatemala, Paraguay, República Dominicana, Jamaica, Trinidad y Tobago, Guyana, Belice, Aruba y Barbados, entre otros.
En los países en que Grupo Unicomer opera en América Latina, se logró la construcción de 68 viviendas transitorias.
Tal obra tuvo una inversión de $335.500 y contó con el esfuerzo de los voluntarios y de las familias involucradas.
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