La sombra del nuevo coronavirus
La participación de los minoristas y los medios de comunicación chinos en Londres se redujo considerablemente debido a las restricciones de viaje impuestas por la epidemia de nuevo coronavirus. Un duro golpe para la industria de la moda, ya que los chinos son los mayores consumidores de lujo del mundo.
Sin embargo, los participantes en los desfiles permanecieron flemáticos, ya que sólo unos pocos llevaban máscarillas sanitarias sobre el rostro.
Estilos optimistas
¿Quiere ser la reina de la noche? Opte por un traje de lentejuelas de Halpern con pantalones patas de elefante o bien por un traje con cristales, con capucha haciendo juego de Richard Quinn.
Para Burberry, el director creativo Riccardo Tisci sigue revisando la gabardina que hizo famosa a la marca, para rejuvenecerla y hacerla más sexy. En su cuarta temporada, creó abrigos híbridos entre la manta y el tapado y mezcló audazmente diferentes estampados cuadriculados.
Conciencia medioambiental
Utilización de materias renovables, "upcycling" (nueva vida de la ropa y accesorios), los diseñadores innovadores fueron destacados en una exposición del British Fashion Council sobre la "moda positiva".
Las grandes marcas también están cambiando. Burberry anunció que su desfile estaba certificado como "neutral en emisiones de carbono" y Tommy Hilfiger presentó su colección primavera 2020 como la más respetuosa del medioambiente jamás producida.
La Semana de la Moda también propuso este año traer trajes de alta calidad para intercambiarlos.
El irlandés Richard Malone, uno de los jóvenes diseñadores más avanzados en el ámbito del desarrollo sostenible, recibió el premio internacional Woolmark el lunes por la noche, mientras que el primer premio Karl Lagerfeld a la innovación recompensó a la estadounidense Emily Adams Bode, una verdadera as del “upcycling”.