Identificar la paternidad de un bebé que no ha nacido no era posible en Costa Rica hasta ahora.
Este servicio ya se brinda en el país, pues el Centro de Diagnóstico Molecular y Estudio Genéticos La California (CEDIMEG) pone a disposición de hombres y mujeres la Prueba de Paternidad prenatal No-Invasiva.
De acuerdo con el doctor Carlos Santamaría, experto en biología molecular, se trata de un análisis que funciona con base a la toma de ADN fetal circulante del feto en la sangre de la madre, ADN de la madre y el ADN del posible padre.
Innovación
Considerando la gama de pruebas de paternidad existentes, el método más confiable y moderno es aquel que toma muestras de ADN del bebé y del posible padre para finalmente determinar el nivel de consanguinidad.
“Normalmente se hace una comparación entre el perfil genético de la mamá y el perfil genético del presunto papá y el perfil genético del bebé (que debe ser una mezcla de padre y madre)”, explicó Santamaría.
La prueba prenatal de paternidad compara el perfil genético de la futura mamá, el presunto papá y el ADN fetal que circula en la sangre materna.
Toma muestras de la mucosa bucal de ambos adultos (procedimiento indoloro) y una muestra de sangre sencilla de la madre. No requiere preparación alguna, pero sí una cita previa.
En Costa Rica este tipo de prueba ya está disponible, su efectividad es del 99% y los resultados se conocen cuatro semanas después de tomarse las muestras.
Esta prueba no represente ningún riesgo ni para la madre, ni el bebé. La prueba prenatal de paternidad no-invasiva es el análisis de paternidad más novedoso existente actualmente.
Primera vez en Costa Rica
El sistema de salud pública de nuestro país ofrece a sus usuarios la posibilidad de realizar una prueba de paternidad una vez que el bebé ya ha nacido y esta se aplica únicamente bajo los lineamientos de la Ley de Paternidad Responsable.
Estas pruebas de ADN deben ser autorizadas por el Registro Civil y se realizan en el Laboratorio de Genética Molecular de la Caja Costarricense del Seguro Social.
Para tomar en cuenta
Se recomienda esperar hasta 14 semanas de embarazo para realizarse la prueba, pues la oportunidad de detectar ADN fetal en la sangre de la madre se incrementa con la edad del feto.
Además, la madre no puede haber recibido ninguna transfusión sanguínea en los 3 meses anteriores a la realización de la prueba.
La madre y el presunto padre deben participar en la prueba el mismo día, pero no es necesario que vayan juntos. Solo se requiere de ambos una muestra bucal, que se obtiene con la ayuda de un aplicador que se coloca en la parte interna de la mejilla. Adicionalmente, se obtendrá una muestra de sangre de la madre para obtener el ADN del feto.
Tanto al padre como a la madre se les solicita firmar un consentimiento escrito para autorizar la prueba.
La prueba es 100% confidencial y se basa en tomar muestras de la mucosa de ambos adultos (indoloro) y adicional una muestra de sangre sencilla a la mamá.