Los masajes son los aliados a nuestros días ajetreados. Indispensables para restablecer el balance de nuestro cuerpo y son minutos dedicados a una misma. Brindan profunda relajación, despiertan los sentidos, purifican el cuerpo y revitalizan el espíritu, por ello es imperativo rendirse ante las manos de un terapeuta holístico o un masajista.
El objetivo de estos tratamientos es estimular la zona física, la energética, la mental y la emocional. Todo dolor o malestar tiene una causa que puede ser meramente física o mucho más profunda, situándose así en las zonas emocionales; con el masaje adecuado, se puede aliviar y armonizar.
De hecho, la acción de llevarse la mano y frotar o presionar con firmeza la zona dolorida es una reacción intuitiva que surge para aliviar el dolor y las tensiones. Con el tiempo y los nuevos conocimientos, los tratamientos de spa han avanzado y se han multiplicado las técnicas para satisfacer gustos y necesidades. Entre el siguiente menú de masajes, elija cuál le cae mejor a su cuerpo.
Compresas calientes: Armoniza y revitaliza el organismo con ayuda de compresas calientes que relajan el cuerpo. Se puede complementar con productos como café orgánico o coco. Además, se pueden realizar estiramientos asistidos, masaje de tejido profundo y hacer uso de piedras frías y calientes.
Con bambú: Ayuda a aliviar el estrés, la tensión y restablecer el equilibrio utilizando la técnica de la terapia de bambú tradicional. Se usan palos de bambú de diferentes tamaños y grosores, según la zona a tratar, y sus objetivos principales son: vitalizar, moldear y drenar el organismo.
Deportivo : Una elección perfecta después de un paseo o hacer ejercicio. Mejora la circulación al trabajar con aceites terapéuticos, presión profunda y estiramientos. También se efectúa para preparar a un deportista con finalidad competitiva antes, durante y después de la actividad física.
Drenaje linfático manual: Es una modalidad de masaje que favorece el funcionamiento del sistema linfático, fundamental para el trabajo eficiente del sistema inmunológico. Se aplica mediante una serie determinada de maniobras manuales, muy suaves, basadas en un profundo estudio de la anatomía del sistema linfático. Los movimientos tienen el fin de drenar o desplazar la linfa que por cualquier causa se encuentra estancada.
Digitopuntura: Esta es una técnica terapéutica de masaje que sigue principios similares a la acupuntura, con la diferencia de que emplea los pulgares, manos, dedos, y codos para aplicar presión sobre ciertos puntos del cuerpo, en vez de las agujas. Está indicada tanto para la prevención de las enfermedades como para el tratamiento de ellas. Las principales causas de consulta a un terapeuta de digitopuntura suelen ser: insomnio, contracturas, malestares digestivos, depresión, problemas en la piel y estrés.
En pareja: Es un momento de relajación al lado de un ser querido. La idea es que ambas personas se relajen y vivan juntos la experiencia sensorial de un masaje. Para hacerlo romántico se pueden usar aceites esenciales con aromas a flores y decorar el espacio con candelas. Los spa ofrecen esta opción y tienen salas equipadas con dos camillas.
Esferas chinas: Las famosas esferas chinas se incluyen en un masaje para brindar relajación. Sus sonidos representan el ying y el yang, así que aporta una sensación de equilibro. Se usa cada una para un lado del cuerpo cuando se realiza un masaje.
Gestáltico: Se caracteriza por una combinación de movimientos cortos y movimientos largos que envuelven todo el cuerpo. Aunque la relajación es uno de los efectos del masaje, el objetivo principal del masaje gestáltico es el incremento de la conciencia corporal a través de la respiración.
Piedras calientes y frías : Técnicas de masaje rítmico y el poder curativo de piedras calientes se mezclan con aceites nutritivos para un efecto de rejuvenecimiento. Las piedras, calientes o frías, contienen una serie de minerales como zinc y fósforo, que trabajan en la reconstrucción de las células de la piel. Otros beneficios son: unifica, coordina e integra cuerpo y mente; además, combate el estrés, la fatiga, ayuda a dormir mejor y reduce los niveles de ansiedad.
Quiromasaje: Su significado literal es masaje con las manos, es decir, no se utiliza ningún instrumento electro mecánico. Proviene de la palabra "quiro" que en griego significa mano y masaje (amasar) que consiste en presionar, frotar o golpear rítmicamente con fines terapéuticos, deportivos, estéticos, cuyo beneficio es aliviar el dolor y revitalizar el cuerpo.
Relajante: Fija su atención en descargar la tensión acumulada, se aplica de forma lenta y con una presión firme y progresiva. Su efecto es la relajación y disminución del tono muscular, a través de los movimientos de masaje que hace la persona que lo aplica. Lo más importante a la hora de realizar este tipo de masajes es actuar sobre los puntos de tensión del receptor, realizando las maniobras en las áreas de tensión (comúnmente llamados "nudos"), que principalmente se ubican en la espalda.
Terapéutico: El masaje es probablemente la herramienta terapéutica más antigua que el ser humano utilizó para comunicarse y proporcionarse un recurso natural contra el dolor. El efecto terapéutico es una de las propiedades más importantes de las diferentes modalidades de masaje. No obstante, cuando se habla estrictamente del término masaje terapéutico, se está haciendo referencia a la modalidad de masaje destinada al tratamiento de procesos patológicos en individuos enfermos y lesionados. Y la técnica consistirá en una serie de maniobras dirigidas a tratar las molestias o lesiones que previamente han sido diagnosticadas.
Fuentes: Juan Paolo Alfonso, gerente general del Auberge Spa en el Hotel Hacienda AltaGracia (Tel.: 2105-3000) y Ricardo Hernández Guth, terapeuta holístico (Tel.: 8869-2198).