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Brasil será el escenario donde el joven atacante Joel Campbell cumplirá su sueño de un Mundial mayor, pergamino que colgará junto al Sub-17 y Sub-20, que ya lucen en su palmarés.
Ese ansiado debut le llegará apenas a sus 21 años. Eso lo hace ser el jugador más joven de la Selección Nacional de Costa Rica en Brasil 2014.
El 26 de junio cumplirá 22 años, pero aún así se encuentra en la lista de los jugadores de menor edad de Brasil 2014.
Su corta edad no le quita el protagonismo y las altas expectativas que se centran sobre su espalda, con ese número 9 que eligió para rendirle homenaje al lesionado Álvaro Saborío.
Campbell se ganó el espacio en el once estelar de Jorge Luis Pinto a base de regularidad y entrega en el terreno de juego.
Además, le añadió fantasía y picardía en el ataque, combinación que le dan la polifuncionalidad para jugar tanto de enganche recostado por un extremo o de centro delantero.
Ya Pinto ensayó con él en ambas posiciones, y en las dos cumplió con creces, aunque todo hace indicar que ante Uruguay iniciará como extremo por derecha.
Campbell es más peligroso cuando está de frente al marco y con espacio para picar.
Es por ese que ese perfil cambiado le queda como anillo al dedo y hace temblar a los defensores y arqueros rivales.
Dar el salto. La buena temporada que tuvo Campbell en el Olympiakos de Grecia de inmediato lo pusieron en la órbita de clubes europeos, muchos de ellos lo quieren en sus filas.
Claro está que el Mundial es la máxima vitrina para un futbolista, y en el caso de Joel Campbell cae en un buen momento.
Ya el Arsenal inglés, club dueño de su ficha pidió que regresara a sus filas tras el Mundial, pero también está abierta la puerta para negociar con algún otro club, o por qué no, quedarse de una vez por todas en los Gunners .
Con el Olympiakos salió campeón de la liga griega, anotó ocho goles y fue figura en Copa y en la Liga de Campeones de Europa.
Campbell dijo que quería llegar “hecho una bestia”, y eso es lo que esperamos todos para poner a soñar al país con sus gambetas, y ojalá sus goles.
