Román Villalobos llegó en solitario a la meta, alzó los brazos y señaló al cielo. Esta vez, esa celebración tenía un motivo de peso y un significado muy sincero.
Fue la forma en la que el escalador costarricense le dedicó la victoria al mexicano Carlos López, uno de esos ciclistas que dejó su huella al ser parte del Canel’s Specialized durante muchos años y que el sábado pasado tuvo una muerte trágica, al ser atropellado mientras se entrenaba en Tlaxcala.
“Le dedico esta victoria muy especial a nuestro amigo Carlos López, quien descansa en paz, que había sido una figura importante en el equipo. Con mucho aprecio y mucho sentimiento se lo dedico a él. Sin lugar a duda, a las personas que han significado mucho en la vida de uno hay que darles un reconocimiento como a Carlos López”, apuntó Villalobos, quien completó los 96,4 kilómetros entre Paraíso, Turrialba, Tucurrique y Paraíso con un tiempo de 2:33:20.
El día anterior, había sido segundo, así que en Paraíso, Villalobos se sacó esa espinita, porque siente que está bien, en forma y con confianza para atacar en el momento correcto.
“Por dicha tomo la valentía de atacar fuerte, sabía que era el todo o nada. Los que están en la disputa de la carrera sabían que si me iba tenían que hacer un esfuerzo bastante fuerte y después lo podían pagar. Hice una travesía de 25 kilómetros, estaba bastante lejos, me concentré bastante y regulé fuerzas para tener el cierre que tuve”, relató Román.
Aquella fuga del segundo día de carrera en la que él no estuvo, es la que tiene a Villalobos lejos de la general. Y también, considera que su victoria en Paraíso es una alegría para quienes siempre están con él.
“Hay una afición que ha creído en mí, sé que el sentimiento de ellos es que gane la Vuelta. Al final las carreras son difíciles y se acomodan diferentes todas las Vueltas, nunca son iguales. Este triunfo significa mucho por todo el apoyo que me dan en carretera y ese túnel de gente fue muy importante”.
Comentó que cuando llegó la hora de subir Tucurrique, fue importante tener adelante a su compañero Óscar Sánchez.
Con el primer puesto de Villalobos en esta fracción, los ticos ya han ganado tres etapas en fila, pues en Esparza lo hizo el seleccionado Sub-23 Sebastián Moya y en Grecia se impuso Daniel Bonilla.
“Eso es importante, habla de que el nivel de Costa Rica está muy bien, de eso se trata, como ciclistas sabemos que el ciclo deportivo ya pronto se acaba en unos años, sabemos que vienen las nuevas generaciones que van a abrir camino y para mí es de mucha alegría que vengan muchachos como Daniel, Moya y todos los que vienen abriéndose camino y que al final son los sustitutos de nosotros”.
La carrera. La jornada tuvo una alta dosis de emoción por los ataques, la montaña y el túnel humano con el que se toparon los corredores en los últimos kilómetros hacia la meta.
El campeón nacional, Joseph Chavarría (Nestlé 7C CBZ Giant) aceleró en el kilómetro 60 y provocó que Villalobos respondiera y atacara a falta de 20 kilómetros para la meta, dándole otro giro a la etapa, en la que los primeros protagonistas del día fueron Julio Padilla (Ópticas Deluxe, Luis Mora (Nestlé 7C CBZ Giant), Óscar Sánchez (Canel’s Specialized), Felipe Molina (Aserrí) y Franklin Loaiza (El Colono).
Mientras que Villalobos iba por la etapa, un poco más atrás, Bryan Salas apretaba el paso. Él es quien marcha segundo en la general y quería descontarle tiempo al líder, al colombiano Diego Cano (TCBY Strongman).
El pupilo de Yurandir Leandro tenía un estricto marcaje de un peón de Cano: Jonathan Cañaveral y logró su cometido, porque recortó 22 segundos y el tico ahora se encuentra a 18 segundos de la camisa amarilla.
Para este sábado, a partir de las 9 a. m. se correrá la sétima etapa de la Vuelta a Costa Rica con 124,74 kilómetros entre Guápiles y Goicoechea.