La exagerada dificultad, por no decir brutal, que tuvo el Campeonato Mundial de Aventura que se realizó en el país fue lo que provocó que solo 20 de 67 equipos lo terminaran.
Esta competencia, que se realizó en el país entre el 2 de diciembre y ayer, es considerada como la más dura que se ha hecho en la historia de esta disciplina, superando a la que se disputó en Fiji en el 2001, cuando estaban los Eco Challenge.
El Mundial de Aventura 2013, regulado por la entidad Adventure Race, se hizo bajo el formato de competencia de aventura en expedición; en ella, los equipos debieron recorrer 815 kilómetros, 400 de bicicleta de montaña, 239 de kayac o rafting y 176 de caminata.
Sin embargo, En cada uno de estos kilómetros la dificultad del terreno llevó a los atletas de 47 cuartetos a retirarse o a no llegar al corte de meta, que fue ayer a las 6 p. m.
Entre las agrupaciones más renombradas que quedaron fuera estuvieron Selva Kailash, de Brasil, y Seagate, de Nueva Zelanda.
Los primeros no pudieron continuar debido a que Jennifer Moos, una de los integrantes, se quebró el codo derecho en el ascenso de la ‘Cuesta del Burro’, una subida como pared llena de piedra suelta.
Seagate, campeón del mundo del 2012, salió a un día de alcanzar la meta, y estando primero en la carrera, cuando Trevor Voyce no pudo seguir por las lesiones en los pies generadas por la humedad típica del trópico, atípica para Europa.
La última víctima del brutal trayecto fue Masami Nakamura, del conjunto japonés East Wind, quien ante el grado de agotamiento se quedó dormida sobre la bici y chocó su cabeza contra un puente de metal, ocasionándose una contusión en la cabeza y salida del certamen.
“El que hayan terminado 20 es un éxito, eso quiere decir que diseñamos bien el recorrido, fueron etapas superlargas y muy duras, pero se pudo completar, no fue una ruta imposible”, comentó Alexánder Baker, director de la competencia.
Dentro de los 815 km los competidores debieron enfrentar 12 microclimas, como el quemante calor de la frontera sur, la humedad del trópico caribeño y el bosque lluvioso, la temperatura de la región atlántica, el frío del cerro Chirripó y la lluvia y calor del norte.
Balance económico. Con respecto a los números que dejó el Mundial, Baker, quien se asoció con el español Antonio de la Rosa para sacar la tarea, manifestó que seguramente “saldrá tablas”, no con ganancias.
“En este momento no le puedo decir cuánto hemos gastado y ganado porque faltan muchos pagos por hacer y cuentas que sacar, solo le puedo decir que el Mundial tuvo imprevistos grandes que se cubrieron, y eso afectó la bolsa”.
Baker recordó que solo el hecho de alquilar un helicóptero para sacar a un competidor de Chirripó les costó $2.600 (¢1.3 millones).
“Luego de que alquilamos el helicóptero el afectado no lo usó ni quiso pagarlo, y nos tocó a nosotros, así que todo ese tipo de cosas van sumando, en un mes le puedo dar un balance económico”, dijo.