Para algunos egoísta, para otros el mejor jugador de la NBA tras el gran y único Michael Jordan. Ahora serán nueve meses más de baja, pero la fuerza mental mantiene en pie a Kobe Bryant. Serán momentos eternos para los fans de la Mamba Negra, en los que además esperamos por, tan solo, una siguiente temporada sin problemas físicos, (sé que es difícil) para que esa despedida, que finalmente tiene que llegar, sea como mejor la merece. Que su legado, el que no conoce de lesiones, se cuente como la historia del hombre de Filadefia que puede lucir una mano llena de anillos, logrados en una sola franquicia... y eso es tan solo una parte de la historia.