Por la muerte de un amigo, boxeadora de Quepos subió al cuadrilátero en Barranquilla 2018

La pugilista Sara Cordero volvió a boxear por la insistencia de su compañero de entrenamientos, quien no pudo verla nuevamente disputar un combate

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Situaciones personales y el estudio habían hecho que la boxeadora Sara Cordero se apartara de los cuadriláteros. Sus guantes estaban a punto de ser colgados y así alejarse por siempre del deporte que toda la vida ha amado, a pesar de tener tres años de ser seleccionada nacional.

Su amigo incondicional, Christian Rivas, compañero de entrenamientos y participaciones en Juegos Deportivos Nacionales por Quepos, le insistía que no lo hiciera. Él sabía que Sara tiene cualidades, que disfruta del boxeo tanto como él y que la disciplina es parte de su vida.

Sin embargo, pese a su insistencia, Christian no pudo ver el retorno de Sara al ring en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Barranquilla 2018.

No pudo alentarla en la pelea de este jueves, pues hace 16 meses Rivas falleció en un accidente de tránsito, en San Vito de Coto Brus, con solo 17 años de edad.

Aunque a Sara le dolió en el alma la derrota por decisión unánime ante la nicaragüense Keyling Osejo, en los 75 kilogramos, la joven quepeña tiene la consciencia tranquila, pues subió al cuadrilátero para dar lo mejor, tal y como Christian hubiese deseado.

“Le dedico estos Juegos primero a Dios, así como a mi compañero Christian Rivas, que en paz descanse, quien me hizo creer en mis capacidades y volver a retomar el boxeo con más fortaleza y a todas las personas que creen en mí”, aseguró Cordero de 21 años.

La boxeadora tiene claro que el combate fue duro, pero subió al cuadrilátero a darlo todo, pues fue parte de la promesa que se hizo cuando supo que iba a estar presente en Barranquilla 2018, más allá del resultado obtenido.

Sara, quien comenzó en el pugilismo a los 14 años, recordó que con Rivas tenía una gran amistad, lo veía casi como un hermano menor y compartieron grandes momentos deportivos, como fue darle tres preseas a Quepos en los Juegos Deportivos Nacionales del 2016.

“En Quepos hay mucho talento para el boxeo, pero nos falta más apoyo. Nada ha sido fácil, por eso le agradezco a mis entrenadores, Roy Acuña y Malena Dal Maso, quienes me apoyaron siempre y motivaron a seguir adelante, pese a todas las dificultades”, comentó Cordero.

La joven atleta combinó el deporte con el estudio, pues recién concluyó sus estudios como tripulante de cabina y obtuvo la licencia para laborar como azafata en un Boeing 737, de acuerdo a la Dirección General de Aviación Civil.

“Puedo laborar como azafata, pero no me ha salido una oportunidad, pero si Dios lo permite lo voy a ejercer. Mientras tanto estoy estudiando idiomas para tener una mayor preparación académica”, explicó Cordero.