Lima, Perú. Sin importar la lluvia, las bajas temperaturas o el tener que ir al baño en plena competencia por problemas estomacales, la costarricense Noelia Vargas logró concluir en la sexta casilla de los 20 kilómetros marcha de los Juegos Panamericanos de Lima 2019.
El tiempo de 1 hora, 33 minutos y 09 segundos (1:33:09) le permitió imponer un nuevo récord nacional, pero además logró el boleto al Campeonato Mundial de Atletismo de Doha, Catar, que se inicia el 29 de setiembre.
El anterior registro de la puriscaleña era de 1:34:20, realizado en junio de este año en La Coruña, España.
La joven de 19 años realizó una extraordinaria presentación en condiciones muy difíciles, pero siempre con el objetivo de alcanzar el crono para el Mundial.
Al principio de la prueba Noelia se pegó al grupo puntero, sin embargo, poco a poco cedió terreno para no desgastarse y evitar una mala ubicación final.
A los 12 kilómetros se detuvo por los problemas estomacales que venía sufriendo desde que arribó a Lima, lo que la hizo perder tiempo valioso y, al menos, una posición en el evento donde se codeó con las mejores del continente en la categoría élite.
“Siento que hubiese hecho una carrera más rápida, pero por problemas estomacales tuve que parar un momento, igual lo importante es que pude hacer la marca para el mundial que era mi objetivo primordial”, comentó Vargas.
“Sinceramente me siento muy orgullosa porque había entrenado muy fuerte para esta competencia. Es un gran orgullo darle un sexto lugar a mi país a pesar de ser una de las competidoras más jóvenes, por lo que es un gran orgullo para mí”, reiteró.
Su entrenadora y mamá, Dixiana Mena, respaldó esas palabras, al asegurar que se cumplió con la meta principal, pues necesitaba bajar la marca 50 segundos y lo hizo en más de un minuto.
Noelia recordó sus entrenamientos en el volcán Irazú, con temperaturas menores a los 14 grados, viento y mucho frío, características similares a las que se encontró en la prueba de este domingo en Lima.
“Fueron condiciones muy similares a las que entrené en el Irazú, donde lo hice incluso a 7 grados. Estuvo muy complicado, pero lo importante era hacer una buena marca, a pesar que tuve que parar por los problemas estomacales”, recordó Vargas.
La marchista mencionó que los problemas estomacales se iniciaron el 30 de julio debido a un emparedado que se comió en la Villa Panamericana.
“No me venía sintiendo bien, pero no creí que me fuera a afectar. Es la primera vez que me pasa en una carrera. Tuve que detenerme para ir al baño, porque estaba perdiendo ritmo. No sé cuánto tiempo duré, pero creo que hubiese realizado un mejor registro”.
La ganadora de la medalla de oro fue la colombiana Sandra Arena, con un tiempo de 1:28:03, seguida de la peruana Gabriela García, con 1:29:00, y la brasileña Erica Rocha, con 1:30:34.