Madrid. EFE. La Unión Ciclista Internacional (UCI) no podrá adjudicarle los siete títulos del Tour de Francia que perdió Lance Armstrong a otros, pues casi la totalidad de sus podios se llenaron con nombres ligados al dopaje.
De las 21 plazas ocupadas en los podios durante los siete años del reinado del estadounidense, solo el español Fernando Escartín (tercero en 1999) no fue salpicado por algún escándalo.
El suizo Alex Zulle, segundo ese año, apareció en el caso Festina y reconoció haberse dopado.
En el 2000 el alemán Jan Ullrich y el español Joseba Beloki acompañaron a Armstrong en el podio, ambos implicados en la Operación Puerto.
El cuarto lugar de aquel año, el francés Christophe Moreau, apareció en los papeles del caso Festina; el quinto, el español Roberto Heras, fue desposeído posteriormente de la Vuelta 2005 y suspendido.
En el 2001 se repitió el podio del 2002 y el quinto fue Igor González, implicado en la Operación Puerto.
Beloki fue segundo en el Tour 2002 y tras él se clasificaron el lituano Rumsas, condenado por dopaje, y los implicados en la Operación Puerto, Santiago Botero, cuarto, e Igor González, quinto.
En 2003, Ullrich fue segundo y tercero Vinokourov, quien posteriormente fue suspendido dos años por dopaje. Otro implicado en la Operación Puerto, el estadounidense Tyler Hamilton, fue cuarto.
En el 2004, el alemán Andreas Klöden fue segundo. Nunca dio positivo pero fue acusado y estuvo implicado en el Caso Friburgo.
El tercero, Ivan Basso, estuvo en la Operación Puerto y fue sancionado.
En 2005 Basso fue segundo y tercero el español Paco Mancebo, implicado junto al italiano.