Para Kevin Solano las barreras no existen. En enero del 2015 descubrió el deporte del halterofilia y hoy cosecha los frutos de su esfuerzo y valentía, al ganar dos medallas en los Juegos Nacionales.
Este herediano de 16 años cosechó la presea de plata en envión tras alzar 90 kg, y ganó bronce en la puntuación general.
"Me siento bastante contento porque estas medallas son el resultado de tanto entrenamiento y esfuerzo, me siento motivado", expresó Solano, a quien hoy nada le quita la sonrisa.
A pesar de que son sus segundas justas nacionales, es la primera vez que Solano gana una medalla. En la edición de San Carlos 2015 los resultados deportivos no fueron lo mejor, aunque tuvo la alegría de que el ramonense ganador del oro le obsequió la medalla.
Solano inició en la halterofilia gracias a la motivación que le dio su expadrastro, y asegura que al inicio fue muy difícil pero fue perseverante porque siente que encontró su deporte ideal.
"Al principio es bastante complicado porque la técnica me la tienen que explicar muy sensorialmente: cómo mover la espalda, las rodillas, todo. Pero después de que uno logra dominar los movimientos se hace bastante sencillo, exceptuando errores que siempre hay que corregir", finalizó Solano.
El estudiante de noveno año del Colegio Técnico de Ulloa dijo que sueña con ganar tres medallas de oro en las próximas justas y poder competir internacionalmente.
Su papá, José Solano, no perdió detalle de la competencia de su hijo y se mostró muy feliz de lo hecho por su hijo.
"Es genial. Uno se siente orgulloso, más con la situación de él. Lo único que quería era que ganara algo para se vea reflejado lo mucho que él se esfuerza", agregó don José.
El papá de Kevin confesó que aún le preocupa ver competir a su hijo.
"A mí me da miedo que él vaya a levantar la pesa, que no se la puede quitar y que le caiga encima. Por dicha no le ha pasado nada", finalizó José.