Sanatura Escazú logró ayer una apretada victoria sobre Coopenae USJ de San Ramón, 73 a 71, y obligó a que se defina el campeón mañana, en el tercer partido de la serie final del torneo de Clausura.
Los tambores que retumbaban en el gimnasio del Liceo de Escazú parecían anunciar la victoria local, que evita que los poetas avancen a la final nacional, pues llegaron con la ventaja de ganar en el cantón alajuelense, 61 a 58.
Pero Sanatura Escazú tuvo que esforzarse al máximo para lograr su cometido, en un partido que fue parejo hasta los últimos minutos.
Guiados por Cristopher Giles, los poetas se distanciaron ocho puntos de la visita en el tercer cuarto, mas no supieron cuidar la ventaja y cedieron terreno.
El duelo cambió de aires gracias a un inspirado Michael Jackson, de Escazú, que si bien en algunos tramos del partido pecó de individualista, cuando se juntó con Alonso Sánchez, inclinaron la balanza.
Entre empujones y reclamos al árbitro, el choque se definió en la última jugada del encuentro, cuando los ramonenses intentaron infructuosamente remontar la ventaja escazuceña de dos puntos.
“Hoy ganamos porque fuimos el equipo que cometió menos errores y supimos contrarrestar los que tuvimos con una gran ofensiva”, expresó el jugador de brujo, David Carnegie, luego del encuentro.
El tercer y último juego será mañana, nuevamente en el Gimnasio del Liceo de Escazú, a las 8 p. m.
El ganador de esta justa se verá las caras con Ferretería Brenes, campeón del torneo de Apertura, para coronar al monarca absoluto del baloncesto costarricense.