Hace casi tres meses el corredor costarricense Jason Villalobos corrió 100 kilómetros con la intención de recaudar víveres y dinero para sus colegas afectados ante la suspensión de carreras por la pandemia.
Aunque en aquel momento dijo que era una locura, pues su distancia más larga hasta entonces había sido de 65 km, cumplió el objetivo principal. Ahora busca otro muy similar.
Las ultramaratones siempre le han gustado, entonces esta vez el reto es muchísimo más grande. El atleta desea completar 265 kilómetros distribuidos en cuatro etapas, entre Limón y Jacó.
La causa es igual de humana, pero hay una población muy frágil: niñas y niños.
Mediante la fundación Break The Chain Costa Rica, ideó este desafío con la intención de hacer consciencia sobre la explotación sexual infantil.
La fundación se enfoca en dar apoyo a las sobrevivientes y también traer consciencia en la prevención del tráfico. Y para parte de sus objetivos utilizan el deporte como una de las plataformas.
“Costa Rica es un país de destino, de origen y de tránsito. De origen porque salen de aquí y se las llevan a Estados Unidos o al sur para exportarlas. De tránsito porque las chicas que salen del sur las pasan por acá, y destino porque es lo que llamamos turismo sexual”, explicó Mónica Mclntyre, de Break The Chain.
La primera etapa saldrá de Limón hacia Guápiles (93 kilómetros), después de Guápiles a Heredia (53 km), de la provincia florense se irá a San Mateo de Alajuela (60 km) y de ahí cerrará hasta Jacó (47 km).
Durante ese recorrido, la fundación distribuirá material en las zonas donde él va pasando para que las personas puedan reconocer las señales de un caso de trata infantil.
Pero como parte de sus aportes, Break The Chain también colabora con centros que dan ayuda a poblaciones vulnerables.
Aunque la fundación está registrada en Estados Unidos, sus recursos son utilizados en Costa Rica.
“Buscamos fondos allá para implementar proyectos acá en el país. Allá solo tenemos el directorio, porque es más fácil, están acostumbrados a donar para este tipo de cosas, aquí es más difícil”.
Una forma de aportar será mediante este reto, pues aunque solo Villalobos correrá 265 kilómetros, hay inscripciones abiertas para participar en la carrera virtual de 5, 10 o 21 km.
Hay dos paquetes: camiseta y medalla tiene un costo de ₡11.000 y solo camiseta ₡6.000. Las inscripciones siguen abiertas para realizar la distancia entre el 11 y 14 de noviembre. Mediante este enlace se pueden registrar.
Aún están por definirse las horas de salidas de Villalobos, quien en algunos tramos tendrá la compañía de corredores amigos. Durante todo el recorrido estará asistido por un carro de la fundación y un ciclista, pendientes de la asistencia.
“Las horas de descanso serán en cada llegada, ahí me recupero y salgo al próximo día. Es la primera vez que hago una carrera multi etapas, pero tengo la base. Lo principal es que la gente sepa la realidad que se vive sobre la explotación sexual de niñas y niños”, expresó el atleta.