17 de marzo del 2011, Arcadio Quesada, Auditor del Icoder / caravaca (Marvin Caravaca)
Mediante un oficio con fecha del 27 de febrero de este año, la Contraloría General de la República acordó rechazar una denuncia que presentó el Consejo Nacional de Deportes en contra de Arcadio Quesada, auditor interno del Icoder.
La acción efectuada por el Consejo se dio por declaraciones de Quesada a este medio, las cuales se publicaron el 11 de enero pasado en la noticia titulada: “Estado ignora cómo se maneja el Nacional”.
En esta información se expuso que desde el 26 de setiembre del año anterior Arcadio Quesada solicitó el libro de actas –del fideicomiso con que se administra el Estadio Nacional– para legalizarlo, pero a esa fecha no se lo habían enviado.
“No he tenido respuesta. No sé (por qué no han facilitado los libros). Para nosotros (auditoría) el libro es fantasma o hay algo extraño que no quieren que uno sepa”, había manifestado Quesada.
Las expresiones del auditor interno provocaron que la Junta Administradora del Estadio Nacional, la cual maneja el fideicomiso, publicara el 17 de enero un derecho de respuesta en este diario.
Dicho escrito fue firmado por Juan Carlos Crespo, Kenneth Thome, William Corrales, Alba Quesada, Carlos Francisco Echeverría, Paulo César Wanchope y María Revelo, miembros de la Junta.
Además del derecho de respuesta, la Junta elevó al Consejo de Deportes, presidido por William Corrales, ministro de Deportes, una denuncia formal contra Quesada.
Ante esto, el Consejo determinó, en su acuerdo 22: “Consultar a la Contraloría de la República si ellos pueden proceder a realizar un estudio preliminar al auditor interno del Icoder, señor Arcadio Quesada Barrantes, debido a las declaraciones contenidas en la entrevista otorgada al periodista José Luis Rodríguez, del diario La Nación , publicada en la edición del viernes 11 de enero del 2013”.
Esta excitativa la respondió, mediante oficio DFOE-DI-466, José Gutiérrez Díaz, fiscalizador de la Contraloría, quien apunta que “desestiman y archivan la gestión”.
Según William Corrales, lo que quiso hacer el Consejo con la denuncia era dejar entrever al auditor que existen procedimientos.
“Todo funcionario puede dar declaraciones en el tanto sepa que debe un respeto y lealtad... el funcionario debió poner la denuncia de los hechos que consideró relevantes al Consejo”, comentó el titular.
Sin mordaza. Corrales dejó claro que la denuncia no representa ningún tipo de bozal en el Icoder.
“Con él (Quesada), aparte de que es funcionario, tengo una buena relación de amistad, pero hay situaciones que deben cumplirse con postulados éticos; no hay mordaza, lo que hay es moral, ética y lealtad”, indicó Corrales ayer por la tarde.
Se intentó conocer la versión de la Contraloría, mas la oficina de prensa dijo que existe confidencialidad en el manejo de denuncias.