EscucharA una fiesta se va con sus mejores ropas, pero esto se le olvidó al mánager de los Dodgers de Los Ángeles, Dave Roberts, quien con sus errores propició la caída de su equipo anoche 5-1 ante los Astros de Houston en el sétimo juego.
Roberts decidió que su lanzador abridor fuera el japonés Yu Darvish, quien ya había sufrido mucho en el tercer juego de la serie, pero igual lo mandó a la lomita y los resultados fueron desastrosos.
Darvish apenas soportó una entrada y dos tercios, permitió las cinco carreras de los Astros, le conectaron tres hits, dio una base por bolas y vio salir el cuadrangular de George Springer.
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Los jugadores de los Astros de Houston celebran en el Dodger Stadium su primer título de Serie Mundial. (KEVORK DJANSEZIAN)
En la primera entrada Darvish vio entrar dos carreras y su rendimiento ya ponía a calentar a todo el bullpen local.
Para la segunda siguió cometiendo errores y se veía inseguro en sus lanzamientos, con lo que entró la carrera de Brian McCann para un 3-0 preocupante.
En esa misma entrada, George Springer conectó un vuelacercas que lapidó las esperanzas de los Dodgers y puso el 5-0.
Ya con el daño recibido, Dave Roberts recurrió a la que para muchos debió ser su primera opción: Clayton Kershaw.
Con tres días de descanso, el mejor abridor de las Grandes Ligas tenía todo para iniciar el partido, pero Roberts no lo vio así hasta la tercera entrada.
Kershaw demostró que es un lanzador dominante, pues en la alta de la tercera apenas necesitó diez lanzamientos para sacar a los tres bateadores.
En total, Kershaw estuvo en la lomita por cuatro entradas completas, permitió solo dos hits, dio dos bases por bolas, pochó a cuatro jugadores y se fue sin recibir una sola carrera.
Los Dodgers no solo fallaron a la hora de utilizar a Darvish, pues desaprovecharon sus opciones de descontar.
En las primeras cuatro entradas los locales dejaron a siete hombres en las bases, incluyendo bases llenas en el primer episodio del partido.
Hasta la sexta entrada los Dodgers dieron señales de vida, cuando un imparable de Andre Ethier permitió la carrera de Joc Pederson, que se convirtió en la única raya en la impecable tarea que sacaron los Astros.
Los Astros no tuvieron problemas en las últimas entradas para controlar a los Dodgers y el último out se gestó entre las manos del venezolano José Altuve, quien le dio la pelota al cubano Yuli Gurriel para destapar la champaña y celebrar su primer título de campeones.
Los Dodgers han perdido 13 Series Mundiales y cumplirán 30 años sin un festejo.
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