Con ocho años de experiencia en el Rally Dakar y ganando en tres ocasiones la categoría 4x4 en cuadraciclos, el argentino Daniel Mazzucco es el guía del nacional Christian Massey en la extenuante competencia.
Durante los últimos 36 meses entrenó y preparó al tico para la competencia, le enseñó sus secretos y además lo instruyó para que pudiera completar la travesía de casi 10.000 kilómetros a través de Perú, Bolivia y Argentina.
Desde que salió la prueba el pasado 6 de enero, en Lima, Perú, Mazzucco ha estado al tanto de la travesía del tico, pues forman parte del Mazzucco Team Can – Am.
La escudería atiende la parte mecánica de los vehículos cada vez que llegan al campamento, reciben instrucciones sobre la siguiente jornada y Mazzucco personalmente conversa con cada uno de sus pupilos para conocer sus inquietudes, experiencias y el estado del cuadraciclo tras cada etapa.
“A mí me habían pedido pilotos de muchos países que los preparara para el Dakar, pero ninguno había sido de Costa Rica. Él (Massey) vino, habló con nosotros y tiene tres años de entrenar con el equipo. Asimiló muy bien las enseñanzas y trabajó bien y eso se demuestra en lo que está haciendo pues lo más difícil es terminar el primer año”, aseguró Mazzucco.
El experimentado piloto argentino agregó que lo más difícil de enfrentar el Dakar es la parte mental, por los extensos recorridos, la soledad que muchas veces se siente durante el trayecto y el cansancio acumulado en cada etapa.
“La parte mental es lo más difícil de dominar y Christian (Massey) lo está haciendo bastante bien. El Dakar es una carrera distinta, por el recorrido. Aquí hay que olvidarse de las comodidades, se debe dormir en las carpas (tiendas de campaña), casi en el suelo, bañarse con agua fría y otras cosas porque las comodidades desaparecen. Aquí es donde se pone a prueba el espíritu de cada uno y saber hasta dónde aguantan”, expresó Mazzucco.
De acuerdo al argentino, Massey trabajó muy bien en los entrenamientos y las competencias en Argentina y Marruecos en las cuales participó, por lo cual tenía claro que estaba preparado. A partir de ahí, lo importante era tener un buen plan de carrera.
“La estrategia que acordamos es que fuera tranquilo, que el objetivo para él era terminar, que llegara con bien, que fuera con calma, que no acelerara más de la cuenta, porque de hacerlo se podía tumbar (volcar) o sufrir algún percance como le pasó al piloto de Colombia (Nicolas Robledo), que se tumbó desde la primera etapa y ha tenido problemas mecánicos. Incluso Christian tuvo que remolcarlo”, dijo Mazzucco.
Apegado al plan, Massey está cerca de cumplir su cometido. Aunque aparece al final de la tabla de posiciones, en la casilla 31 de 32 participantes, el tico ya puede considerarse sobreviviente en una lista de competidores que tenía 49 nombres el primer día de competencia.
Luego de descansar este jueves, debido a la cancelación de la etapa para motos y cuadraciclos debido al clima, Massey está a dos días de competencia (viernes y sábado) y 1.193 kilómetros de cumplir de la meta en Córdoba, Argentina.